Omegle por mucho tiempo fue uno de los sitios de chats en línea más populares que existieron en internet. Luego de 14 años de operaciones ha llegado su fin. Es así como esta plataforma que fue usada por millones de usuarios ha desaparecido, lo que significa que las conversaciones aleatorias ya nunca se podrán realizar aquí.
Esto fue anunciado por el creador de esta herramienta llamado Leif K-Brooks, quien redactó una carta en el que expuso los motivos que lo llevaron a tomar esta decisión; al igual que todas las experiencias negativas y positivas que le quedaron de este espacio digital, que por mucho tiempo fue una forma de interacción para mucha gente.
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Este portal se caracterizó por las video llamadas al azar que tenían los internautas con otras personas en distintos lugares del planeta, con las que era posible conocer a alguien nuevo solo con presionar un botón; incluso varios youtubers hicieron contenido a partir de lo que encontraban en este lugar.
¿Cómo funcionaba Omegle?
En esta plataforma los usuarios podían hablar con desconocidos que aparecían de manera aleatoria, ya sea a través de texto o video. Solo tenían que ingresar y esperar a que en su pantalla saliera alguien para poder conversar.
Si no querían seguir con la interacción solo tenían que “elegir al siguiente” para que saliera alguien nuevo. Estaba la posibilidad añadir intereses para contactar internautas con gustos similares, aunque esto no era necesario.
En la carta K-Brooks explicó que creó el sitio en el 2009 a los 18 años, cuando aún estaba con sus padres en Vermont, Estados Unidos.
Destacó que vivía en un lugar que estaba alejado del resto del mundo, pero él siempre quiso tener la posibilidad de interactuar con otras personas.
Explicó que uno de los principales problemas a los que se enfrentó es que no podía socializar con los demás con facilidad, en especial porque de niño fue víctima de una violación, por ese motivo, al diseñar este portal podía sentirse protegido.
A pesar no tener un alto presupuesto o una estrategia de publicidad para promocionar este espacio, al poco tiempo cientos de internautas empezaron a usar Omegle, quienes después se convirtieron en millones.
Indicó que desde entonces se ha ocupado para “explorar culturas extranjeras; obtener asesoramiento sobre su vida de terceros imparciales; y para ayudar a aliviar los sentimientos de soledad y aislamiento. Incluso he oído historias de almas gemelas que se conocieron en Omegle y se casaron. Estos son sólo algunos de los aspectos más destacados”.
¿Por qué cerrará Omegle?
K-Brook sostuvo en la misiva que también se generaron varias consecuencias negativas, pues hubo quien ocupaba esta herramienta con otros fines. Uno de los aspectos que lo hizo tomar la elección definitiva de irse fueron los constantes ataques en contra del portal.
Aseguró que al principio estos comentarios eran constructivos, pues le ayudaban a corregir diferentes errores e implementar varias estrategias, no obstante, estas opiniones dejaron de tener este sentido.
“La única forma de complacer a estas personas es dejar de ofrecer el servicio. A veces lo dicen, explícita y abiertamente; otras veces, se puede inferir de su acto de establecer estándares que no son humanamente alcanzables. De cualquier manera, el resultado neto es el mismo”, indicó.
El programador explicó que no cuenta con los recursos emocionales para atender estos señalamientos ni con el financiamiento que se requiere para pelear en contra de quienes hacen un uso inadecuado y aunque lamenta la decisión, para él es lo mejor.
“Desafortunadamente, lo correcto no siempre prevalece… Operar Omegle ya no es sostenible, ni financiera ni psicológicamente. Francamente, no quiero tener un ataque al corazón cuando tenga 30 años”, concluyó.
