El poblano Luis Amés acaba de superar la meta de 17 mil seguidores en su fanpage de Facebook, no obstante, el influencer, que también se ha desarrollado en otras áreas como el canto y la actuación, dice que su función es transmitir mensajes de paz y amor en una sociedad cada vez más quebrantada.

Yo no soy solamente un vloguero más, no me dedico a subir contenido gracioso. Comencé este proyecto con mi compañía Vann Rize y con los compañeros que conforman la misma, entre ellos Manuel Palafox y mi novia María Ángel comentó en entrevista con El Sol de Puebla.

Hace seis años, Luis Amés inició su trayecto en un cada vez más competitivo sector, donde la oferta de contenido e influencers es mayor, al grado de saturar las plataformas. Sin embargo, para él tener miles de seguidores no es su objetivo.

“Este es un espacio para compartir básicamente amor, un mensaje de paz social, donde la gente pueda creer que sus sueños se pueden hacer realidad y son lo suficientemente grandes como el tamaño de su corazón. No nos cabe la duda de que a veces el dinero es el único medio en el que podemos alcanzar esos sueños, pero hay otras maneras y formas de luchar con esfuerzo para mostrar tu talento y compartir el mensaje”, agregó en tono taciturno.

Nosotros nos dedicamos a subir contenido social, contenido cultural, de cierta manera de moda y tendencia sin sobrepasar los límites

Luis dijo que desde 2014 ha picado piedra para tener un lugar en la escena de los influencers poblanos.

¿Cuál es tu función como influencer?

Más que influencer me dedico a cuestionar la vida, el ser influencer actualmente ya se toma como a entregar códigos de descuento y yo intento compartir algo que no se puede ver: como los momentos, los detalles, algo que no tiene que ver con lo material.

Quiero compartir al mundo un mensaje de paz, actualmente estamos rodeados de tanta soberbia de tanta avaricia y de pecados que, creo que podríamos unificarnos más.

Para Amés, el tener seguidores ya no es tan importante, incluso, reveló, que él no recibe dinero por sus contenidos como otros colegas, tampoco promueve productos.

“Cuando comencé no estaba tan preocupado por el alcancé, yo decía que con mis 100 seguidores era suficiente; empecé a crecer no tanto en YouTube sino en Facebook hace un par de años que llegué a los 16 mil y hoy (martes) justamente llegué a los 17 mil y no me di cuenta de cómo, simplemente dejé de pensar en qué venía, dejé de buscar seguidores. La constancia hace que los frutos rindan”.

El ser influencer actualmente ya se toma como a entregar códigos

Luis Amés, influencer

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