Durante una emisión del programa “Miembros al aire”, Jorge El Burro Van Rankin señaló que era momento de ponerse serios para plantearle dos preguntas al actor Eduardo Santamarina: la muerte de su padre y el alcoholismo que sufrió.
Para el primer cuestionamiento, Santamarina afirmó que se encontraba en Puebla grabando una novela, mientras su padre se encontraba en lo que el actor llamó “uno de tantos internamientos” a causa de la cirrosis hepática que padecía, cuando él se replanteó su problema de alcoholismo; ambas situaciones hacían sufrir a la madre de Eduardo.
La muerte de su padre fue un duro golpe para él y su familia, pues tuvo que tomar terapia para superar el trago amargo ya que hubo momentos que sintió resentimiento y odio hacia él por la manera en que murió.
En su intervención, Paul Stanley le cuestionó cual había sido la parte más difícil de aceptar su enfermad, a lo que el también conductor respondió que es un proceso que cuesta y es difícil de realizar.
Reveló que el momento en el que tocó fondo fue cuando buscaba esconderse en hoteles, acompañado de prostitutas, pues sólo necesitaba platicar y ser escuchado, hecho que lo hizo recapacitar y darse cuenta de lo que en verdad quería en la vida.
Entre las cosas que lo hicieron recapacitar está el cuestionarse si quería ser encontrado sin vida por una sobredosis, imagen que recreó en su mente y no fue nada agradable, además afirmó que otro de los motivos que lo detuvo fue pensar en el dolor que le causaría a su madre, hermanos y demás seres queridos.
Como un ejercicio de autoamor, él mismo reconoció que acabar con su vida de esa manera no era lo que merecía, hecho por el que ingresó a una clínica de adicciones, grupos que lo ayudaron a recuperar el camino y salvar su vida.
Por su parte, Raul Araiza lo cuestionó sobre el sentimiento que vivió al ver nacer a sus hijos, según Santamarina, esta experiencia además de gusto, alegría y felicidad, también es una sensación de miedo e inseguridad.
Confiesa que cuando se es primerizo surgen las dudas sobre cómo reaccionar ante el mundo y en especial en su caso pues tuvo cuates en el nacimiento de sus primogénitos, experiencia que viven juntos padres e hijos, que llena de alegría a quién lo vive.
Además indicó que hasta la fecha siguen los cuestionamientos y miedos en su mente pero también los aprendizajes.
Finalmente, Mauricio Mancera le preguntó sobre las actividades que hace durante el confinamiento para no recaer en las tentaciones de los vicios, a lo que afirmó que ahora es un hombre de casa y después de haberse “reventado” varios años, ahora le llena tener a su familia con él.