El Premio Nobel de Literatura para el artista Bob Dylan, de 75años de edad, quien a lo largo de su carrera se ha desempeñadomás como músico, sorprendió al mundo entero.

Algunos por supuesto criticaron negativamente la resolución deljurado por otorgarle este importante reconocimiento en letras a unmúsico, aunque, otros como el presidente de Estados Unidos, BarackObama, elogiaron el veredicto.

Escritores y políticos discutieron sobre el tema, algunos afavor y otros en contra, sin embargo, en el submundo del Twitter,un espacio sin legitimidad para las opiniones, los millones deusuarios de esta red social no quisieron desaprovechar laoportunidad de alzar la voz, de protestar, al característicoestilo de los “memes” (imágenes con alteracioneschistosas).

Uno de los “memes” que más llamó la atención fue el deuna lista que revelaba el supuesto puntaje de otros músicos, comoEnrique Bunbury, Dani Martin o los hermanos Cano (Mecano), que sehabían quedado a puntos de alcanzar a Dylan y arrebatarle elNobel.

Otro no menos gracioso fue el fotomontaje del cantautorguatemalteco Ricardo Arjona, quien comúnmente es criticado por lalírica rebuscada de sus melodías: “Bob Dylan ganó el Nobel,tengo esperanzas”, se lee en una de las divertidasalteraciones.

Por su supuesto el ingenio del mexicano no se hizo esperarcuando apareció una alteración del arte del Premio Nobel con laimagen de José Alfredo Jiménez, quien para los tuiteros, es elmás indicado es llevarse el reconocimiento por su contribución alas borracheras.

“Por haber creado una nueva forma poética de expresión juntocon la gran tradición de la canción mexicana”, se lee eninglés y en tono de burla en la leyenda de esta imagen.

Hubo quien fue más allá. El conductor Yordi Rosado escribióen su cuenta de Twitter: “Entiendo cómo debe sentirse Murakami.Lamento la decisión del Comité Nobel. Saludos y un abrazo fuertede literato a literato”.

El mensaje generó infinidad de burlas hacia Rosado porcompararse con el escritor japonés Haruki Murakami, el favoritopara alzarse con el Nobel de Literatura este año-

Aunque el mensaje apareció en su cuenta oficial, y luego fueborrado, Yordi salió en su defensa y explicó que su perfil habíasido copiado, por lo que él no había escrito tal cosa:

“Hola a todos, les cuento que copiaron mi perfil y andacirculando un tweet falso mío, hagan caso omiso. ¡Buen día atodos!” (sic), se justificó.

Por cierto, al japonés le llovieron “memes” porque no sellevó el Nobel de Literatura, incluso hubo quien le otorgó elpremio Bandamax como consuelo.