La noche de este lunes Queta Lavat y Jesús Ochoa se presentaronen el Teatro Principal, para ofrecer a los poblanos dos funcionesde la obra “Conversaciones con mamá”.
Bajo la producción de Rubén Lara y dirección de AntonioCastro, los histriones presentaron la historia de una madre deochenta y dos años y su hijo Jaime de cincuenta, quienes vivenen mundos muy diferentes.
Jaime, interpretado por Jesús Ochoa, aparentemente lleva unavida normal: tiene esposa, dos hijos, su casa, dos coches y unasuegra que atender.
Mamá (Queta Lavat) sobrelleva su vejez lo mejor que puede yvive tranquila y relajada.
De manera inesperada, la estabilidad de ambos se ve perturbadacuando Jaime es despedido de su trabajo y tiene que tomar ladifícil decisión de vender el departamento donde vive su mamá,sin embargo, no es del todo fácil, ya que hay un tercer miembroque intensifica la situación: Gregorio, el novio de Queta.
La noticia de que Mamá tiene un novio, no le hace gracia aJaime, lo que da inicio a una serie de rabietas, reclamos yperipecias con las que el público soltó las carcajadas.
Con su estilo peculiar, Ochoa hizo gala de su humor blanco alhacer referencia al odio hacia las suegras; incluso, se aventó unoque otro chiste sobre la muerte y un par de anécdotas sobrelas amantes y las cornudas.
En todo momento, el público se mostró atento a la historia, lacual dejó claro que nunca es demasiado tarde para iniciar unaconversación con mamá (o cualquier otro ser amado) y decirlo que jamás se ha dicho, como una forma de sanar elinterior.
El público, agradeció la gran interpretación de ambosactores, despidiéndolos del escenario con una ovación de pie.
