Sueños de Pimpolina eleva el espíritu infantil con su arte clown

La dramaturga Andrea Christiansen nos presenta su obra, la cual busca erradicar la arbitrariedad de los adultos sobre los niños

Alan A. Luis Diego

  · viernes 14 de junio de 2019

El show de pantomime Sueños de Pimpolina estrenó ayer en Puebla su corta temporada de tres funciones en el Teatro de la Ciudad.

Previo a su serial de representaciones, la dramaturga y actriz Andrea Christiansen charló con El Sol de Puebla sobre este espectáculo que involucra los sentimientos, la magia y el deseo de ser libre.

“La historia parte de una historia tradicional de circo; la clásica rutina del payaso que quiere tocar un instrumento en la pista y viene el jefe y le dice que no. Y todas las astucias que va inventando la payasa (Pimpolina) para irse librando de este señor Prohíbelo Todo y poder llevar a cabo su deseo, que es tocar un instrumento”, comentó al respecto de este punto de partida de la trama.

El deseo de cumplir el sueño más anhelado es el motor principal de esta puesta en escena al contraponer a Pimpolina: la niña ingenua pero tenaz con el señor Prohíbelo Todo: esa voz o voces, que todo el tiempo nos están diciendo: ¡No! ¡No vas a poder!

ESTÁ EN LA ONDA

El derecho a soñar y la libertad son los tópicos principales de este montaje, que, a decir de Andrea, van muy ad hoc con los movimientos de empoderamiento femenino.

“Esa es la razón por la que decidimos reestrenar, pero fundamentalmente, la idea de hacer un reestreno de la obra es porque siento que en este momento la arbitrariedad (abuso) y el autoritarismo son temas muy importantes para los niños y las familias de reflexión”.

La gira de Sueños de Pimpolina recorrerá varias ciudades de la República Mexicana; en el caso de Puebla, es con entrada gratuita gracias al apoyo de EFIARTES (Estímulo Fiscal a Proyectos de Inversión en la Producción Teatral Nacional).

“La idea es llevar un espectáculo de calidad a un teatro de prestigio, en este caso, el Teatro de la Ciudad de Puebla, y poder ofrecerle el acceso a esto y al público en general y a toda esta gente que no acude al teatro porque no tienen los recursos para hacerlo”.

La obra es un despertar y una reflexión sobre la imposición con la que frecuentemente uno se topa día a día.

“Poder ofrecer este espíritu de buscar la libertad y de defender el derecho de soñar que tiene Pimpolina y que tiene que ver con la esencia del clown, que constantemente está en busca de la libertad y la creatividad”.

Para Andrea Christiansen, los niños son los que padecen por la imposición del adulto sobre su pensamiento y forma de actuar; mientras que la obra busca que los padres apoyen las decisiones de los niños, mas no que impongan sus deseos reprimidos.

“Los niños están en su derecho a ser como ellos quieran ser; a sobreponerse o revelarse frente a la arbitrariedad del adulto”.

La temática de la obra viene muy bien en este momento

Andrea Christiansen, Dramaturga

Funciones

  • Viernes 14 de junio: 9:30 h, 11:00 y 13:00 horas
  • Domingo 16 de junio: 12:00, 17:00 y 19:00 horas