“Está hasta la madre”. Así resumió un agente vial local, el último día de las vacaciones de Semana Santa en el denominado Pueblo Mágico. Esto mientras intentaba convencer a los automovilistas foráneos de no estacionarse en lugares prohibido en los alrededores del zócalo a falta de cajones. “Ya no caben los coches”, terminó comentando. Muy cerca, las familias de visitantes siguen tomándose a racimos selfies en las ya famosas letras turísticas de Atlixco.
Según previsiones de organismos de la Iniciativa Privada (IP) y de las autoridades turísticas locales, la llamada Semana Mayor sirvió para darle un “impulso tipo juego de brincolín” a los, hasta antes de esa fecha, alicaídos prestadores de servicios.
“Aún con el temor de una tercera ola de Covid 19 con mayor fuerza, las familias cansadas del confinamiento y de la pandemia, lograron juntarse con los dueños de los negocios y lograron una buena combinación económica y de esparcimiento o diversión”, sentenció un representante de la IP entusiasmado y preocupado al mismo tiempo.
“Preocupado especialmente por los futuros números de contagios, hospitalizados y posibles fallecimientos tras este periodo. En caso de ser éstos muy malos, volveríamos a los escenarios de incertidumbre financiera y sanitarias de mediados del año pasado. Es decir, a cerrar de nuevo y paralizar todo”, agregó durante una plática con este diario.
Cifras preliminares de la oficina de turismo local refieren, a manera de resumen, un incremento en las dos últimas semanas, las de mayor trascendencia católica, de un 60 por ciento de reservaciones en hoteles y de asistencia a lugares de convivencia y de reunión. “Hablamos de restaurantes, cines, algunos bares, paseos e incluso por momentos centros comerciales”.
Sin embargo, admitieron las fuentes consultadas, quienes aún, a pesar de ser la mejor temporada del año, siguen perdiendo clientes y dinero son los balnearios de la ciudad y de los alrededores. “A pesar de ir familias a literalmente tocarles la puerta, no pueden trabajar todavía y algunos están casi en bancarrota”, recalcaron.