Un aproximado de 60 sexoservidoras de la capital poblana se hicieron pruebas gratuitas de sífilis, Virus de la Inmunodeficiencia Humana (VIH) y se vacunaron para prevenir el Virus del Papiloma Humano (VPH), de ellas, cinco trabajadoras están embarazadas, así lo informó Mariela González Galindo, líder de Las Chicas de la 14 A.C., quien aprovechó para mencionar que siguen en saldo blanco por este tipo de enfermedades.
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En entrevista con este medio, Mariela explicó que las jornadas son fundamentales para concientizar a las trabajadoras sobre la importancia de la salud sexual, promover conductas saludables y prevenir la propagación de enfermedades. En estas actividades, ofrecen información, pruebas de detección, distribución de preservativos y hay el diálogo sobre temas sexuales.
Desde su óptica, al aumentar la conciencia y el conocimiento sobre las enfermedades de transmisión sexual, contribuye a reducir su incidencia y promueve una vida sexual segura y saludable para todos. En este punto, indicó que desde que ella está al frente (casi cinco años), ni una de las integrantes ha presentado una enfermedad sexual, por lo que ellas no son foco rojo en enfermedades
“Lo hacemos por prevención y por demostrarle a las autoridades que no somos el foco rojo de enfermedades. Los que más contagian son parejas heterosexuales, con una relación, no nosotras. Por el momento no ha habido ni una sola detención de VIH y en caso de que se detecte, ya tenemos un mecanismo de actuación”, informó.
Mariela detalló que, si alguna trabajadora sexual presenta una enfermedad de este tipo, le brindarán todo el apoyo necesario. El primer paso es agendar una cita en el Centro Ambulatorio para la Prevención y Atención en SIDA e Infecciones de Transmisión Sexual (CAPASITS). De ahí recibirán tratamiento y le darán respaldo para adquirir su retrovirales.
Otro tema que se abordó en la jornada fue el del trabajo sexual reconocido, ya que, para Las Chicas de la 14, es legítimo. Si se avala como un trabajo legal, se les podrá brindar derechos laborales, garantizando condiciones seguras y justas. Además, el reconocimiento del trabajo sexual, permite a las personas acceder a los servicios de salud, asesoramiento y apoyo social de manera más efectiva.
“Yo le pido a la sociedad que se sensibilice ante este tema, no somos las malas del cuento, somos un mal necesario y nosotras no buscamos ser rescatadas, buscamos ser reconocidas”, puntualizó.
En otro orden de ideas, informó que en coordinación con el Centro de Apoyo a la Identidades Trans realizarán un diagnóstico para identificar las zonas en donde más registran peligro, a qué autoridad le tienen más miedo y los lugares en donde les niegan servicios públicos. Estos datos los ocuparán de manera interna, pero también como un exhorto para las autoridades.