El Arzobispo de Puebla, Víctor Sánchez Espinosa, llamó a los fieles católicos a poner en práctica una verdadera conversión, luego de haber encabezado la ceremonia de la vigilia pascual y encendido el fuego nuevo, para celebrar la resurrección de Jesucristo.
“En estos tiempos difíciles en que la violencia se ha hecho una constante, hago un llamado a todos a la conversión y a vivir en la cultura del diálogo, el encuentro y de la paz, ya que solo a través de esos valores podremos superar las barreras del odio y tener como la primera comunidad cristiana una misma alma y un mismo corazón”, dijo en su mensaje con motivo de la pascua.
El líder de la grey católica encabezó la ceremonia de la vigilia pascual cerca de la media noche del sábado y emitió un mensaje con motivo de la pascua ayer, domingo de resurrección, para reiterar que la vida es sagrada y por lo tanto debe ser defendida y cuidada ahora que la humanidad enfrenta la pandemia de la Covid-19.
“Tampoco olvidemos que Cristo resucitado es el señor de la vida porque ha vencido a la muerte, por tanto en este tiempo tan hermoso de la pascua cuidemos y protejamos el don sagrado de la vida, desde su concepción hasta su muerte natural, cuidemos nuestra vida, cuidemos la salud y la vida de nuestras familias”, agregó.
En tanto que la misa dominical de ayer fue presidida por el Obispo auxiliar de Puebla, Tomás López Duran, quien reiteró la convocatoria del líder de la iglesia en Puebla e hizo oración por aquellos niños y niñas a los que se les ha negado el derecho a la vida.
Asimismo, pidió por el eterno descanso de Elsa Fortiz, una mujer que murió el pasado viernes santo mientras se encontraba apreciando la procesión de las imágenes de Puebla y que recibió la bendición del arzobispo durante sus últimos minutos de vida.
López también pidió orar para que concluya la guerra en Ucrania y el sufrimiento que de ella se desprende, por el fin de la violencia, la inseguridad y la corrupción que afectan a nuestro país.
“Que la paz sea para nosotros de ahora en adelante una responsabilidad de todos, no es solamente de determinados sectores, la paz es responsabilidad de todos, dejemos que esos dos aspectos marquen o sean los paradigmas para nuestra vida de fe, sólo entonces, con el perdón y la paz caminaremos en una iglesia sinodal, en una iglesia que sigue a Cristo”, concluyó.