La Ley de Educación del Estado de Puebla, impulsada por el gobernador Luis Miguel Barbosa, es un revanchismo contra los estudiantes y rectores de las universidades que en marzo pasado levantaron la voz contra la inseguridad.

Así lo dijo la presidenta del Comité Directivo Estatal del PAN, Genoveva Huerta Villegas, al señalar que la ley no es educativa sino política debido a que no respeta el Estado de Derecho ni la propiedad privada y no trae ningún beneficio para los estudiantes.

Declaró, en entrevista con El Sol de Puebla, que Barbosa está gobernando con el rencor y no con la cabeza fría y en beneficio de los poblanos, de modo que el Partido Acción Nacional interpreta la ley como una revancha contra los colegios privados, porque pretende hacer uso de los muebles e inmuebles de particulares y decidir sobre los colores.

“Si tú decides meter a tu hijo en una escuela, A, B o C, esta es una obligación entre particulares, si estás de acuerdo que ahora tu hijo lleve una chamarra roja con un pantalón azul o que ahora vaya todo de gris, es un tema entre particulares y los ciudadanos tenemos la libertad de decidir en qué escuela vamos a meter a nuestros hijos”, ejemplificó.

Genoveva Huerta estimó que la Ley de Educación, aprobada el 15 de mayo en fast track en el Congreso del Estado, es revanchismo contra las escuelas privadas que exigieron al gobierno de Barbosa un alto a la inseguridad, de modo que el PAN defenderá el derecho de padres de familia y universidades de elegir la educación y prestar el servicio.

La estrategia del partido comenzó este lunes 25 de mayo mediante la publicación de los formatos de amparos para que los ciudadanos y las autoridades de escuelas inconformes puedan descargarlos en su página de internet https://panpuebla.org/, llenarlos con su nombre y dirección y pueda ser presentado ante la instancia correspondiente.

Otra sugerencia de la dirigente es que los diputados locales presenten reformas a la ley que el 18 de mayo fue publicada en el Periódico Oficial del Estado, con el fin de remendarla.

“Por eso les decíamos desde un inicio que escuchen a todas las partes, hoy todavía tienen la oportunidad los diputados de hacer las cosas de forma distinta, pero también los ciudadanos, padres de familia o autoridades educativas tienen la oportunidad de ampararse ante esta terrible ley que está atropellando su libertad”, agregó.