Habitantes de Santa María Tonantzintla, en San Andrés Cholula, acusaron que el proyecto “Barrio Smart” afectó la identidad de la comunidad nahua tras la demolición del puente que tenía una antigüedad de 100 años, así como un reloj que era símbolo de las tradiciones indígenas.
Mercedes Tecuapetla, habitante de Tonantzintla, dijo que el proyecto que encabeza el Gobierno del Estado destruyó el patrimonio cultural, afectando con esto la identidad y autodeterminación, ya que fueron retirados elementos arquitectónicos que son simbólicos para el 66 por ciento de la población originaria.
A la par del desarrollo del Smart City Latam Congress que se lleva a cabo en el estado, informó que la comunidad no fue consultada por lo que se violó uno de los derechos fundamentales. Las obras iniciaron en enero de este año y modificaron el espacio público.
“El retiro y la modificación de los elementos arquitectónicos que constituyen la plaza, altera la percepción y el sentido de identidad de la población, toda vez que son elementos que expresan las costumbres y formas de vida de la comunidad”, destacó.
Por otro lado, Juan Carlos Flores explicó que se interpusieron cuatro recursos ante tribunales federales, con la finalidad de que se haga una consulta a la población indígena, se restituya el daño causado y también, se suspenda el proyecto del cual se han deslindado tanto el Gobierno de Puebla como el de Cholula.
El peritaje antropológico a cargo de la Procuraduría General de la República (PGR) señala que Santa María es un pueblo indígena que ha visto afectada su autonomía después de que se realizaron las obras del “Barrio Smart”. La comunidad se fundó en 1557 y conserva su organización civil y religiosa, que se compone de tres barrios que cumplen con el servicio de la iglesia.
En su intervención, Julio Glockner lamentó que no se haya tomado en cuenta a la comunidad para que se llevaran a cabo estos trabajos que han afectado la identidad y la cohesión social y comentó que es necesario que los servidores públicos reciban alguna amonestación, por lo que es deseable reformar la Ley.
Flores explicó que solo para la construcción del reloj, la comunidad entera participó y realizó actividades en torno a su simbolismo. Hoy, dijo, los habitantes se encuentran divididos por causa del proyecto “Barrio Smart”.