Madres de familia de los municipios de Nealtican y San Nicolás de los Ranchos denunciaron que fueron excluidas en la delegación Puebla de la Secretaría del Bienestar de los apoyos económicos que corresponden por el extinto programa de Estancias Infantiles, ya que no aparecen en el padrón, aunque fueron registrados en los censos.
Araceli Meza Luna, Elizabeth Huilotl Tequitlalpa, Giovana Santamaría, Jessica Paredes Romero y Kenia Santamaría, informaron que a través del grupo de WhatsApp avisaron que este 14 de abril era el último día para obtener su orden de pago para canjearlo en efectivo.
El procedimiento se haría a cargo con personal de la delegación, ubicado la colonia Gabriel Pastor en Puebla. No obstante, al intentar hacer el trámite les dijeron que no están en el sistema debido a que “probablemente la estancia donde van sus hijos los dio de baja, había irregularidades en el lugar o que algún dato del niño estaba mal”.
“A nosotros nos anotaron en el censo. Nos entrevistaron los llamados Servidores de la Nación. Dimos la dirección, los datos de los niños. Ahora que vamos a pedir el apoyo, nos dicen que no aparecemos en el sistema (…) Nosotros queremos saber si nos van a dar el apoyo, si no es así, para nosotros buscar quien va a cuidar a nuestros hijos mientras trabajamos”, dijo Elizabeth Huilotl.
La madre de familia comentó que personal de la delegación les dijo que quienes no estén en el sistema tendrán que esperar hasta después del 2 de junio para recibir el apoyo, por la veda electoral. Sin embargo, para esa fecha, algunos niños ya no podrán recibir nada porque habrán cumplido 4 años.
Recordó que desde que quitaron el subsidio directo a las Estancias Infantiles, el gobierno federal de Andrés Manuel López Obrador informó que ahora a las madres de familia recibirían un apoyo económico superior a 3 mil pesos, hecho que aún no es una realidad.
“Los políticos han dicho que este recurso iba a llegar. Queremos que nos abran el sistema y nos digan porque no estamos. Cuando se hizo el censo, el gobierno federal ya tenía nuestros datos como madres y de los niños, solo fue verificar que no fuera fantasma, y dar nuestra firma. Se trata de una burla”, concluyó.