En vísperas de la temporada pluvial, campesinos del municipio de Coronango acusaron que nuevamente la empresa armadora Volkswagen recurre al uso de bombas antigranizo para ahuyentar las lluvias y evitar afectaciones en sus producciones aparcadas en sus diferentes áreas de estacionamiento, con la caída de granizo.
Señalan que anoche, al menos contaron más de 30 detonaciones en la zona y temen que esta práctica ejercida por los empresarios vuelvan a lastimar sus cultivos, como sucedió el año pasado, cuando empezaron a usar este sistema antigranizo.
Se debe comentar que a raíz de este señalamiento, campesinos de Cuautlancingo, otro municipio colindante a Coronango y también afectado por este escenario, anunciaron que recurrirán al Ayuntamiento para pedir su intervención y frenar el uso de estos cañones.
El año pasado, la planta armadora Volkswagen enfrentó varias protestas ciudadanas por este escenario y para minimizarlas prometió concretar un proyecto consistente en la colocación de mallas antigranizo en sus estacionamientos.
Incluso los Ayuntamientos de Coronango y Cuautlancingo, en su momento confirmaron el ingreso de las solicitudes de permisos para estas obras por parte de esta firma alemana, pero se desconoce si efectivamente fueron iniciadas o no, porque hasta el mes pasado, a las arcas municipales de estas Comunas no había ingresado algún recurso por el pago de recursos financieros.
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