La dulcería denominada “Ángeles de Santa Clara” cerró sus puertas para siempre y con ello, la tradición de 22 años se fue también en una de las calles más emblemáticas para la venta de estos dulces y que a causa del Covid-19 y las rentas atrasadas, la que hasta ayer era la propietaria del local, Sonia Hermoso Aquino, ya no estaba dispuesta a pagar un tercer mes de renta cuando ya debían dos por un monto mayor a los 27 mil pesos, puesto que la decisión de estaba tomada
El pasado 20 de mayo, El Sol de Puebla acudió al llamado de Sonia Hermoso quien puso el plan de remate de dulces así como la venta de Talavera, juguetes hechos de madera y los muebles que han sido utilizados para lucir los dulces que para fortuna de la familia, prácticamente se han agotado.
“Estoy con emociones encontradas, entre triste y agradecida así como temerosa tal y como se los platiqué hace unos días porque no sabemos hacia la situación económica hacia donde va, les agradezco a ustedes porque la gente se enteró de mi situación y vino a comprar los dulces, ahora estoy en lo último del remate y los muebles”, señaló.
Aunque el local original marcado con el número 10-A de la calle 6 oriente (Calle de Santa Clara) ya bajó la cortina para siempre, le facilitaron por unos días un pequeño local ubicado a 30 metros de los “Ángeles de Santa Clara”, con el fin de vender los muebles de madera restantes.