El espejo de agua en el parque Amalucan dejará de funcionar de manera definitiva como alberca pública, anunció Beatriz Martínez Carreño, secretaria de Desarrollo Urbano y Sustentabilidad del Ayuntamiento de Puebla, quien indicó que se tiene previsto colocar fuentes danzarinas.
Llenar la superficie requiere de cuatro millones de litros de agua, equivalente a un gasto de un millón 400 mil pesos, motivo por el cual se exploran otro tipo de alternativas que requieran menos inversión y mantenimiento, pero sin perder que sea un atractivo a los visitantes.
La funcionaria municipal señaló que el año siguiente habrá de definirse la nueva vocación de este espacio creado en julio 2018 por el gobierno estatal de José Antonio Gali, pero ha permanecido cerrado al público en dos ocasiones, la más reciente desde octubre pasado.
“Es un ojo de agua, su vocación no es ni tiene las condiciones de alberca, se llena con un millón 400 mil pesos para cuatro millones de litros de agua y se trata, del uso responsable de los recursos”, asentó.