La imposición de aranceles por parte de Estados Unidos al acero y al aluminio importados desde México desestabilizará el peso, influirá en el precio de las gasolinas y aumentará, en definitiva, la incertidumbre económica nacional, coincidieron académicos.
El anuncio del Departamento de Comercio de Estados Unidos de terminar con la exención de aranceles para México, Canadá y la Unión Europea en estos metales preocupa a los especialistas.
“Ya hay repercusiones, el peso se está deslizando, contribuye mucho a la incertidumbre económica que estamos viviendo. Esto puede representar, por lo menos en el futuro inmediato, altibajos, mucho ruido en la política económica, en la política económica internacional de México”, advirtió José Luis García Aguilar, director de la licenciatura en Relaciones Internacionales de la Universidad Iberoamericana Puebla.
Los sectores automotriz y metalmecánico serían los más afectados por la medida proteccionista, que se aplicaría, si no hay sorpresas de última hora, a partir de hoy. “En México tenemos casi todas las automotrices del mundo, no solamente las alemanas, sino asiáticas y europeas, y que requieren el insumo del aluminio. México no es un gran productor de aluminio pero le va a afectar tanto en el precio nacional, en los productos finales, como en el precio internacional”, reveló Paulino Arellanes Jiménez, profesor investigador de la Benemérita Universidad Autónoma del estado de Puebla (BUAP).
Para García Aguilar el anuncio podría interpretarse como un “acto no amistoso” por parte del presidente de Estados Unidos, Donald Trump, en plena renegociación del Tratado de Libre Comercio de América del Norte (TLCAN).
“Esta medida, fundamentalmente, es una medida electorera de Donald Trump”, argumentó. “En noviembre Estados Unidos tiene elecciones intermedias, son las elecciones que cada administración de los presidentes de Estados Unidos tienen a la mitad de su cuatrienio. Es muy probable que… el Partido Republicano pierda al menos la Cámara de Representantes, que es el equivalente a la Cámara de Diputados; lo que hace Donald Trump es intentar no perder al electorado”.
Trump ha demostrado ser, recordó Arellanes Jiménez, una figura incómoda para México. “Nos enfrentamos, desafortunadamente, entre comillas, en Estados Unidos a un jefe de estado que de alguna manera denuesta mucho de México, denuesta mucho del Tratado de Libre Comercio, denuesta muchas cosas en la relación bilateral”, apuntó.
Para Renata Zilli Montero, directora de la licenciatura en Relaciones Internacionales del Tec de Monterrey en Puebla, precisamente el carácter irreverente de Trump podría jugar a favor de México. “Sabemos que Trump dice muchas cosas y se retracta. Lo mejor es esperar, desde luego, tomar previsiones, pero esperar a que sea concreta la medida”, llamó.