En los municipios de Cohuecan y Tepexco, un grupo aproximado de 180 pobladores retuvo a cinco personas del sexo masculino, a quienes acusaron de ser presuntos secuestradores, para después privarlos de la vida.
El gobierno de Puebla sostiene que debe prevalecer el principio establecido en la Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos que, en su artículo 17, destaca: “Ninguna persona podrá hacerse justicia por sí misma, ni ejercer violencia para reclamar su derecho”, de manera que estas acciones son injustificables.
Las autoridades municipales de Cohuecan y Tepexco, activaron con oportunidad el Protocolo de Actuación para Casos de Intento de Linchamiento, desplegando a sus cuerpos de seguridad en tiempo y forma, sin embargo, el grupo de pobladores inconformes mantuvo una actitud agresiva, sin acceder al diálogo con las autoridades municipales y estatales, lo que impidió el rescate de los sujetos retenidos a quienes más tarde les quitaron la vida.
Al lugar arribaron elementos de seguridad de los municipios de Acteopan, Tilapa, Tlapanalá, Cohuecan y Tepexco, así como de la Guardia Nacional, de la Secretaría de la Defensa Nacional y de Seguridad Pública Estatal, a quienes no les permitieron el acceso al lugar donde mantenían a los retenidos.
Sobre los hechos, la Fiscalía General del Estado (FGE) abrió una carpeta de investigación y trasladó a la zona a personal para la realización de las diligencias correspondientes con el fin de deslindar responsabilidades.
El Gobierno del Estado ha decidido que las fuerzas de seguridad estatales y federales mantengan su presencia en la región con el propósito de garantizar el regreso de la autoridad civil municipal, hasta reestablecer la tranquilidad social y recuperar la convivencia de sus habitantes.
Los cuerpos de seguridad compuestos por la Guardia Nacional y la Secretaría de Seguridad Pública del Estado, mantendrán patrullajes constantes tanto en Tepexco como en Cohuecan para garantizar el orden y la tranquilidad de la población.
Alrededor de las diez de la noche, fuerzas estatales que se ubicaban en Cohuecan, se replegaron para permitir las labores ministeriales y colaborar a calmar los ánimos de la población.
Dicha acción fue aprovechada por un numeroso grupo de pobladores que emprendió una persecución que derivó en el linchamiento de dos personas más, presuntos cómplices del supuesto grupo de plagiarios.
Hasta el momento continúan las autoridades en labores para contener el clima de tensión que se registra y reestablecer el orden en la región. Con este hecho, suman siete los linchados en la comunidad.
