El pasado martes 16 de enero, al señor Héctor Manuel Espinoza y a su esposa Alejandra Rodríguez les notificaron que uno de sus hijos se había accidentado, por lo que acudieron a su domicilio para verlo. Héctor, sufre de Alzheimer y de un momento a otro se salió de la casa y hasta el día de hoy, siguen sin dar con su paradero.
Su esposa, Alejandra Rodríguez, pidió apoyo de la ciudadanía para encontrarlo, ya que teme por su seguridad. Las autoridades emitieron un boletín de búsqueda, pero no han podido hallarlo. En suma, la familia ha sido víctima de extorsión, pues le marcan y les piden depositar sumas exorbitantes de dinero para tener “pistas” de su ubicación.
En entrevista con este medio, Alejandra compartió que todo ocurrió la mañana del 15 de enero, cuando les notificaron que su hijo había tenido un accidente. Ella y su esposo, Héctor Manuel Espinoza y Pérez, acudieron a su domicilio ubicado en Bosques de Manzanilla para darle acompañamiento y se quedaron a dormir ahí.
Debido a que Héctor sufre Alzheimer no le gusta estar mucho tiempo fuera de su hogar, que es su espacio seguro. Hay que mencionar que habla perfectamente y todavía se acuerda de muchas cosas, pero esporádicamente tiene lapsos en donde no recuerda en donde está.
Héctor le dijo a su esposa que ya se quería ir, pero que antes tenía que ir al baño. Ella se metió a un cuarto con sus demás familiares a recoger sus cosas y cuando acudieron al baño, estaba vacío. No escucharon en qué momento se salió del domicilio.
Alejandra nunca deja solo a su esposo, pero en esta ocasión fue en cuestión de segundos que ocurrió la desaparición. Salieron a buscarlo en la colonia, pero no tuvieron éxito, acudieron a su casa para ver si se había acordado del camino de regreso, pero tampoco estuvo ahí.
Acudieron a la Fiscalía General del Estado de Puebla (FGE) en donde emitieron una constancia de hechos y lanzaron el boletín de búsqueda. Héctor tiene 74 años y llevaba puesto un gorra azul marino, sudadera del mismo color, pantalón de mezclilla y tenis color rojo. Si lo llegan a ver, su esposa pide llamar a las autoridades o llevarlo al Paseo Bravo, ya que las naranjitas lo conocen porque trabajaron juntos.
“Yo no sé en dónde ande, yo no sé en dónde está. Sólo quiero que me apoyen porque ya fuimos a muchas partes, a los pueblos, con toda su familia, ya de todo hemos hecho. Ya hicimos lonas para ver si alguien lo ve, pero no hay nada, nos han llegado a llamar diciendo que lo ven, pero cuando llegamos no es él”, comentó.
En suma, la familia ha recibido llamadas para extorsionarlos, les piden que depositen dinero para “tener pistas” de su paradero. Al día de hoy, no han accedido, pero tienen miedo de que alguien le esté haciendo daño o lo tengan encerrado en contra de su voluntad para sacar un beneficio económico.
En caso de tener información al respecto se pide llamar al 2226821258.