El movimiento Antorcha Campesina amagó con utilizar, a partir de este fin de semana, el zócalo de Puebla como sitio para vender diversos productos, ya que están en contra de las cuotas que se establecieron en la villa navideña.
Además, advirtieron que no usarán las estructuras metálicas, que representaron un costo de 2 millones de pesos a la Comuna, sin embargo, dijeron que colocarán en cualquier punto sobre la calle 5 de Mayo.
En una protesta en el zócalo de la ciudad, donde denunciaron retiro de ambulantes en cualquier punto de la ciudad, los antorchistas señalaron que se preparan para “invadir” el Centro Histórico de la capital.
“Con toda la gente que ven aquí vamos a invadir 5 de Mayo y el zócalo de la ciudad, si el gobierno quiere agredirnos y buscar la violencia, adelante. Nuestras necesidades son de comer y de mantenernos, tratar de pasar una navidad tranquila”, refirió el líder Francisco Machorro.
Reiteró que es inviable pagar por “el jacalito”, en referencia a las casetitas navideñas, un monto superior a los 600 pesos.
“SOLO RECHAZA INSTALARSE UNA AGRUPACIÓN”: GOBERNACIÓN
Por otra parte, la Secretaría de Gobernación Municipal, informó que 15 de 35 villas instaladas ya son ocupadas debidamente y 21 comerciantes más ya se alinean en los espacios que ocuparán las restantes villas.
A través de un comunicado, informó que, durante más de la mitad del día, la 5 de Mayo permanece libre de comerciantes ambulantes y el resto del Centro Histórico apenas registra un incremento menor al 10 por ciento de puestos: “Ello debido a los constantes recorridos de inspectores del Ayuntamiento y al diálogo continuo, mismo que, de ninguna manera puede significar ceder ante presiones que buscan el beneficio personal. En tal caso, el Gobierno Municipal actuará de manera firme para aplicar la ley”, expone.
Informa que solo una agrupación y sus líderes aún rechazan ocupar las villas y que ese acto “representa una provocación para caer en la ineficaz práctica de reprimir” para resolver esta problemática.
Sin embargo, la dependencia que dirige René Sánchez señala que el gobierno de la ciudad no caerá en el uso irracional de la fuerza pública y mantendrá dee manera respetuosa su invitación al diálogo.
“La fuerza pública municipal no permitirá la práctica de hechos violentos o conductas antisociales, mientras que las áreas de concertación buscarán de todas las formas de diálogo que los comerciantes por sí mismos o agrupados se sumen a este proceso de transformación sin precedentes”, concluye.
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