De más de 6 mil 872 millones de pesos, sin considerar aún la deuda por 200 millones de pesos ni recorte de personal, pero sí varias medidas de austeridad como la reducción del parque vehicular, del consumo de combustibles y de servicios de telefonía, entre otras, es el presupuesto con que cuenta la BUAP para 2019.
Este presupuesto, aprobado por unanimidad por el máximo órgano de autoridad que es el Consejo Universitario, es mayor en 591 millones 570 mil pesos, es decir, en 9.4 por ciento, respecto a los 6 mil 280 millones 814 mil de 2018, sin embargo, a decir del Tesorero General, Óscar Gilbón Rosete, ya incluye el apoyo extraordinario de 300 millones de pesos ofrecido por el Gobierno del Estado y es el más limitado que ha tenido la institución en años.
Y es que agregó, del presupuesto total, la mayor parte de los recursos están comprometidos en la nómina de los docentes y trabajadores administrativos de la universidad, 5 mil 540 millones 326 mil pesos, es decir, el 80.6 por ciento, mientras que el resto de los recursos continuó, debe destinarse al gasto corriente, adquisición de materiales y suministros, servicios generales y desarrollo y mantenimiento de la infraestructura universitaria, pero son insuficientes.
Como prueba, expuso que pese a que la Dirección de Infraestructura Educativa (DIE) tiene proyectos de obra por 800 millones de pesos, sólo le fueron aprobados 75 millones de pesos para este año.
No obstante, resaltó, se incluyeron varias disposiciones de contención del gasto a fin de enfrentar la crisis económica y las nuevas políticas financieras del gobierno federal, evitar o postergar el recorte de personal se planteó hace algunas semanas, y, especialmente, incrementar la matrícula de estudiantes en el Proceso de Admisión BUAP 2019.
El rector de la BUAP, Alfonso Esparza Ortiz, añadió que estas medidas de austeridad se aplicarán cuanto antes y se valorarán las economías que puedan obtener, para definir luego si hacen uso de la línea de crédito por 200 millones de pesos que gestionaron.
POLÍTICAS DE AUSTERIDAD
Entre las medidas de contención del gasto anunciadas por Gilbón Rosete y que se aplicarán desde hoy en la institución, figuran la reducción al mínimo de personal de honorarios y otros trabajadores, de nuevas plazas para docencia e investigación, la reducción de 10 por ciento en gastos operativos de todas las unidades académicas y administrativas, la eliminación de pagos de consumo de combustibles, alimentos, telefonía móvil y adquisición de autos nuevos, entre otros.
Además, subrayó, se reducirán los apoyos a eventos y viajes académicos para estudiantes y docentes y juntos con la Oficina de la Abogada General se implementará un programa de separación voluntaria para personal no académico.
Para finalizar, Esparza Ortiz llamó a los universitarios a cooperar con ellas para privilegiar la misión educativa y formadora de la institución, “son necesarias para mantener el crecimiento de la Institución y cumplir la meta establecida para incrementar la matrícula y que existe la posibilidad de aceptar a más jóvenes que contribuyan al progreso de la nación”, concluyó.