En Puebla y en el país, la pobreza no ha podido reducir debidoa que el asistencialismo ha sido la medida para "combatir" ladesigualdad, coincidieron académicos de la UniversidadIberoamericana Puebla, quienes dijeron que en el estado, prevalecela población en pobreza, que impacta a seis de cada diezhabitantes.
Al presentar el análisis "México: país de pobres y no declases medias", el académico Miguel Reyes dijo que solo elexgobernador, Rafael Moreno Valle pensaba que Puebla estaba en elprimer mundo, pues de acuerdo a estadísticas oficiales, solo el17.4 por ciento de la población es de clase media y 5.2 por cientose encuentran en la riqueza.
Se planteó si la esperanza de los jóvenes es la migración,aunque dijo que tampoco sería la opción más viable debido a lapolítica del presidente de Estados Unidos, Donald Trump, quien seha empeñado en segregar a los mexicanos.
Agregó que si bien, las estadísticas indican que la pobreza vaa la baja en el país –en el caso de Puebla se señala que de2014 a 2016 la pobreza extrema redujo un 43.3 por ciento-, losdatos se hacen poco creíbles y “trucados”, pues aparentementeaumentan los ingresos de los pobres y reducen los ingresos de losricos. “En un paísdonde la desigualdad se está profundizando, ¿quién cree que elingreso de los pobres está creciendo entre 30 y 50 por ciento?; esabsurdo que eso ocurra y que los ingresos de los más ricos esténreduciendo un ocho por ciento”.
Refirió que de 2014 a 2016 aparentemente ha bajado el númerode personas en pobreza, pero podría ser por los programasasistencialistas, que se encargan de contener las carencias de laspersonas, mediante las dádivas del programa Prospera.
Durante la ponencia en la que presentaron el estudio, dijo queen 22 años, la situación de personas en pobreza se ha mantenidopese a políticas públicas para abatir la pobreza, debido a que enel año 1992, casi el 55 por ciento de la población no podíaadquirir una canasta básica completa, mientras en el 2014 la cifraapenas llegaba a un 53 por ciento, lo que solo significaría un 2por ciento de avance.
Este académico, junto con Miguel López y Miguel CalderónCheluis, también de la Iberoamericana, dijeron que el ingreso ylas oportunidades laborales no han avanzado tanto como el padrónde beneficiarios en programas sociales, que pasó de 5 millones a25 millones, en alrededor de dos décadas.
