El incremento salarial de 6.5 por ciento en global pactado porVolkswagen de México y su sindicato marca un referente para lasnegociaciones de la industria automotriz al haber logrado superarla inflación, coincidieron especialistas.
El acuerdo –cerrado el pasado jueves entre la armadora y elSindicato Independiente de Trabajadores de la Industria Automotriz,Similares y Conexos Volkswagen de México (Sitiavw) –, queconsiste en un aumento de 5 por ciento directo a la remuneración,1 por ciento al fondo de ahorro y 0.5 por ciento a vales dedespensa y la creación de 250 plazas de base, ha suscitadoreacciones encontradas entre industriales y expertos en elsindicalismo poblano.
Para el presidente en el estado de la Cámara Nacional de laIndustria de la Transformación (Canacintra), Horacio PeredoElguero, dicho convenio significa que hay “un buen entendimiento,paz laboral en la entidad” y supone “una referencia” para elsector automotriz del estado.
“Marca una confianza en el estado de Puebla y marca unaconfianza para con los trabajadores que laboran y también para lasnegociaciones que llevarán a cabo las otras empresas del sector deautopartes”, refirió en entrevista vía telefónica con El Solde Puebla.
El incremento conseguido es ni más ni menos, expuso HubertoJuárez Núñez, especialista en la industria automotriz ysindicatos e investigador de la Facultad de Economía de laBenemérita Universidad Autónoma de Puebla (BUAP), una cifra queasegura que los 9 mil 630 trabajadores de la planta del municipiopoblano de Cuautlancingo no perderán capacidad de compra.
“Yo creo que el global justamente cumple su papel, que esconservar el poder adquisitivo de los salarios de Volkswagen;cualquier cosa que hubiera estado por debajo de eso hubierasignificado una pérdida”, advirtió, también en conversacióntelefónica con este medio: “cualquier negociación que esté pordebajo del 4 o 5 por ciento significará entonces que lostrabajadores tienen una pérdida si consideramos el ÍndiceNacional de Precios al Consumidor hasta el mes de julio”.
Dicha variable, hecha pública por el Instituto Nacional deEstadística y Geografía (Inegi) para expresar la inflación,alcanzó en Puebla en julio los 6.48 puntos porcentuales –desdeel mismo mes del año pasado–; a nivel nacional, ascendió a 6.44por ciento.
“Significa –el aumento salarial– que quedan en tablas enlos niveles de inflación. Cuando tú tienes un incrementoequivalente al incremento de la tasa de inflación, entonces eneconomía significa que el poder adquisitivo de estos salarios nose reduce, pero no aumenta tampoco”, profundizó el académico.“En estas condiciones tan difíciles por las que atraviesan lossindicatos en México, para mí no es exactamente una malanoticia”.
RETO PARA LOS SINDICATOS Y REFERENTE PARA LASEMPRESAS
Los resultados de la revisión salarial, que permitieronconjurar la huelga en Volkswagen de México, imponen, señalóJuárez Núñez, un reto para compañías y sindicatos, quedeberán acordar incrementos a las remuneraciones de sustrabajadores por arriba de la inflación.
“Evidentemente que ahí tienen un reto, es decir, que susincrementos igualen la inflación anualizada en el punto en quenegocien; eso es cierto, es un reto. La dificultad estriba en eso:en que no se oculte la información en el sentido –de queestablecer porcentajes– hacia atrás significa pérdidas de lacapacidad adquisitiva”, aseveró.
El alza de 6.5 por ciento marca, coincidió Peredo Elguero, unreferente para las negociaciones de la industria automotriz.“Este acuerdo también implica razones de productividad para conlas obligaciones de los trabajadores hacia la empresa, y ahora esmás que un referente para que cualquier otra negociación decualquier otra empresa del sector de autopartes tenga una basesobre la cual negociar sus propios contratos”, afirmó.