La Cámara Nacional de Comercio, Servicios y Turismo (Canaco) y la Cámara Nacional de la Industria de Restaurantes y Alimentos Condimentados (Canirac) acusaron que hay una persecución y acoso del Ayuntamiento de Puebla y su área de Normatividad Comercial hacia los empresarios establecidos, pues en solo 3 meses, se han interpuesto multas injustificadas, desde 9 mil pesos, a cerca de 95 negocios.

Olga Méndez, presidenta de Canirac, y Rafael Herrera, presidente de Canaco, se quejaron porque el área de Normatividad ha emprendido una política recaudatoria, mediante clausuras o multas a los negocios, los cuales habían operado sin alguna anomalía desde hace 5, 10, o los últimos 30 años.

Explicaron que las cuestiones por las que se les han interpuesto las sanciones son, en algunos casos, irrisorias, como el hecho de no contar con un reloj a la entrada del establecimiento, o el hecho de que algunos empleados no cuenten con uniforme.

Herrera dijo que, la persecución comenzó durante diciembre de 2018, cuando los inspectores emprendieron una ardua revisión a los negocios, estableciendo multas por un monto de 500 mil pesos, en cuanto a sus agremiados.

La representante de Canirac coincidió con su compañero en que hay aumento de la cantidad de multas, y una disminución de ventas de los restauranteros, en gran parte, por la competencia desleal que representan los comerciantes informales.

No tener lugares suficientes para estacionarse es uno de los argumentos que los funcionarios municipales han dado a los negocios, aunque en otras ocasiones también se exige que éstos tengan un nombre escrito, posean un reloj a la entrada, entre otras situaciones.

Especificaron que 60 socios de la Canaco y, por lo menos 35 de la Canirac, son los que han sido víctimas de la persecución, con multas que van desde los 9 mil pesos, en lo que va de 2019.

El representante de Canaco calculó que son 100 millones de pesos por las multas de estos negocios en referencia, en el primer trimestre del año. Sin embargo, ello implicaría que cada uno pagase un promedio de 1 millón de pesos por multa, y no solo los 9 mil pesos mínimos que dijeron los empresarios que se desembolsan por cada amonestación.