El impacto de los baños en seco está llegando a Puebla. Esta práctica promete ser la solución efectiva al desabasto de agua en varias regiones del estado, así como una alternativa ahorradora, ecológica y sostenible para mitigar la contaminación en ríos por aguas residuales.
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Ía Chavela Calleja, docente y distribuidora de la marca WCeco en Puebla, explica que este producto puede reducir el consumo anual de al menos 15 mil litros agua por persona, equivalente a tomar dos litros de agua diarios por 20 años. Sin embargo, prejuicios sobre la higiene o su funcionalidad han evitado que más personas se sumen a esta práctica.
En la lista de desventajas, los baños en seco no tienen más que ideas erróneas, pues se les ha señalado de ser iguales a las letrinas, es decir, que acumulan los desechos en un gran depósito sin ningún tratamiento, pero es todo lo contrario.
“En Puebla observamos que hay gente interesada en cambiar la forma en la que van al baño, pero todavía hay cierto rechazo porque piensan que es más sucio o que no sirve, pues es más barato que una taza convencional”, explica en entrevista con El Sol de Puebla.
El baño seco funciona de la misma manera que una taza de baño conectada a la red de drenaje, incluso, poseen la misma forma. La diferencia es que, mientras que en la ordinaria los desechos se van con el agua, en esta se tapan con un aserrín especial que los cubre y los hace inoloros, pero una vez alcance cierto nivel, es recolectado por la empresa y se composta para crear tierra fértil.
Desechos se convierten en tierra fértil
Ía presume que esta alternativa no solo reduce el consumo de agua en los hogares y la contaminación de los cuerpos de agua, sino que gracias a este producto es posible convertir los desechos humanos en tierra fértil que puede ser utilizada para la agricultura.
El proceso funciona de esta manera: para empezar el baño seco es una taza portátil, que tiene la misma forma que una convencional, por lo que no es necesario modificar alguna conexión en el hogar o quitar el inodoro de agua.
Al ser colocada en el sitio de su elección, puede usarse de la misma manera, pues cuenta con un asiento y, al fondo, está una cubeta en donde se puede defecar y orinar. Al finalizar, el desecho se cubre totalmente con un aserrín otorgado por la empresa. Así se irá llenado esta cubeta hasta que alcance cierto nivel y se retirará, cambiándola por una nueva, pues WCeco otorga cuatro.
Al estar cerca de llenar estas cuatro cubetas, se contacta al colaborador con el que adquirió su taza y este se llevará a compostar los desechos, cambiando los recipientes llenos por otros limpios a 100 pesos cada uno.
Aunque pagar 100 pesos por la recolección de cada cubeta puede sonar abrumador, el costo es menor que lo que se paga a alguna concesionaria de agua por lo que consume una taza ordinaria al mes, pues dichas cubetas duran de acuerdo con la frecuencia con la que vaya al baño el usuario y, al no necesitar ningún tipo de instalación, cada persona del hogar puede tener su propia taza.
Finalmente, los desechos se convertirán en tierra fértil, evitando contaminar ríos y, especialmente, ahorrando miles de litros de agua por persona, lo que se traduce en un ahorro en el pago por consumo del vital líquido.
Lleva un proceso muy cuidadoso en el que el resultado es tierra fértil. Resulta que el hogar deja de contaminar y, además, es benéfico para el cultivo de árboles porque es totalmente inocua (que no hace daño), pues no tiene patógenos ni residuos, lo peligroso o que pudiera causar alguna enfermedad ya está totalmente procesado explica.
Baño seco promueve conciencia ambiental
Inminentemente el día cero llegará al estado y a nivel nacional. La crisis por el abastecimiento de se agrava con el paso del tiempo y es momento de adaptarse a alternativas que no dañen al medio ambiente, advierte.
En el último año, por el tema de las sequías, empezamos a ver lo importante que es el agua, que muchas veces lo damos como un recurso por sentado, que siempre estará ahí, pero no le damos la importancia que tiene cuidar este elemento señala.
Es necesario hacer conciencia, además, de que al seguir utilizando baños convencionales se promueve una cadena de contaminación en los cuerpos de agua y, a la vez, en los mares. Pocas veces se enseña en las escuelas en dónde terminan los desechos humanos, los cuales no desaparecen por arte de magia al bajar la palanca, sino que se convierten en aguas residuales que, en el caso de Puebla, son poco tratadas.
“Esta crisis ambiental que estamos enfrentando tiene que ver con esta desconexión de que somos seres naturales y para volver a insertarnos tenemos que regresar en la lógica de ciclos, pues ningún animal terrestre orina o defeca en el agua, sino en la tierra (…) el 70 por ciento de lo que se desechan de en los baños llega directamente al mar, eso es muchísimo”, lamenta.
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El baño seco, incluso, puede ser utilizado en hospitales para aquellos pacientes que no pueden trasladarse al baño por su enfermedad, pues es movible. Otro beneficio es que es accesible, pues sus precios van desde los 700 hasta los cuatro mil 500 pesos en promedio, dependiendo el modelo.
Ía no solo vende baños en seco, sino que se ha encargado de promover esta práctica sostenible a través de talleres y conferencias. Si usted está interesado en este servicio, puede contactarla a través del número 722 493 3193.