Al sonar del mariachi, el gobernador Miguel Barbosa Huerta inauguró la rehabilitación del Mercado José María Morelos y Pavón, mejor conocido como el Mercado de El Alto, un inmueble con 92 años de historia que reúne tradición gastronómica y cultural en la ciudad de Puebla. No obstante, lo hizo sin el alcalde Eduardo Rivera Pérez, pues dijo, “las cosas deben ser así, por separadito”.
Luego de que a finales de 2021 la administración estatal comenzó los trabajos para recuperar la infraestructura de este lugar, que es considerado por el Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH) como patrimonio cultural, el mandatario poblano entregó el espacio este miércoles a los locatarios que ahí laboran. Inclusive pidió disculpas por el destiempo en su acción.
“Una disculpa por no haberlo hecho los primeros meses de mi gobierno, [para] citarlos, platicar y ofrecerles que se pudiera remodelar este barrio. Gracias a todos ustedes (…) por haberse entendido con el gobierno y poder remodelar este este lugar”, declaró.
Igualmente, recordó que el sitio carecía de escrituras, sin embargo, señaló que su administración ya entregó esa documentación al ayuntamiento que encabeza Rivera Pérez.
A propósito del munícipe, aunque hace un año fue invitado al evento con motivo del inicio de la remodelación del mercado, este 2022 la situación fue distinta, pues no fue requerido, ya que a decir del mandatario estatal, es mejor mantener distancia con él por ahora.
“Yo feliz de venir a inaugurar los trabajos. Sí, vengo solo. No vengo con el presidente municipal, respeto mucho al presidente pero creo que las cosas deben de ser así, por separadito, con mucho respeto”, defendió.
Lo anterior lo dijo en alusión a lo que declaró días antes, cuando indicó que ya no haría eventos públicos con el edil, debido a que calificó que, después de recibir el apoyo de los dirigentes del Partido Acción Nacional (PAN) para recorrer el estado, todas sus apariciones públicas serán considerados actos anticipados de campaña.
La rehabilitación del mercado de El Alto
Por su parte, el titular de la Secretaría de Infraestructura, Luis Roberto Tenorio García, detalló que fueron incluidos en la restauración un total de mil 90 metros cuadrados de terreno y 105 locales comerciales. Para lograrlo, se invirtieron poco más de 20 millones de pesos.
Hizo hincapié en que fueron mejorados los cimientos y la fachada del lugar, se modificaron las instalaciones hidrosanitaria, eléctrica y de gas, además de que fueron implementados acabados con temáticas culturales, cancelería y herrería.
Además, otra de las adecuaciones fue el techo, el cual, según confesó el gobernador, tuvo que ser colocado de lámina y no de cemento, como inicialmente estaba previsto, esto a petición del INAH. No obstante, aseguró estar en contra de esta decisión.
Igualmente, en cuanto a la pintura de exteriores e interiores, el titular del Ejecutivo manifestó a los locatarios que pueden elegir el color que más les guste, incluso les recomendó no dejarse influenciar por temas afines a partidos políticos.
“Del color que quieran, que nadie les venga sugerir que sea de color guinda, de Morena, menos azul, del PAN. Píntenlo del color que quieran, del color del pozole, del mole de panza, de lo que quieran, que la politiquería no los contamine”, exclamó.
En ese mismo sentido, recomendó a los comerciantes no dejar que la próxima administración gubernamental abandone el mantenimiento del mercado: “Exijan que los respete”.
De forma paralela, sostuvo que Ana Lucía Hill Mayoral, titular de la Secretaría de Gobernación (Segob), tendrá pláticas con la Comisión Federal de Electricidad (CFE), esto con el objetivo de regularizar sus adeudos del servicio.
Finalmente, enfatizó que el mercado alberga múltiples tradiciones y es motivo de orgullo para Puebla. Por ello, invitó a la población a acudir a este recién restaurado inmueble y compartir experiencias gastronómicas mexicanas, así como culturales, con los tradicionales mariachis y hasta los Huehues.