Nuevamente, los trabajadores del Poder Judicial de la Federación (PJF) con sede en Puebla llevaron a cabo una manifestación en contra de la Reforma Judicial impulsada por el presidente y aprobada por el Senado, así como diputados federales. En esta ocasión, la protesta tuvo lugar en la autopista México-Puebla, generando un caos vial significativo en una de las vías más transitadas que conectan a la entidad con otras regiones del país.
Aproximadamente 100 personas, entre empleados del Poder Judicial y sus familias, participaron en el bloqueo, que se extendió desde las 11 de la mañana hasta la tarde. Durante la movilización, los manifestantes levantaron consignas como “¡Seguiremos en la lucha cueste lo que cueste!” y “¡Juez votado, corrupto asegurado!”, evidenciando su firme rechazo a la reforma que, según ellos, pone en riesgo la autonomía y la integridad del sistema judicial.
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Los trabajadores judiciales han anunciado que continuarán realizando este tipo de acciones en el estado de Puebla para concientizar a la población sobre las implicaciones de la reforma. “Nuestro objetivo es informar a la ciudadanía sobre cómo esta reforma afecta no solo a los trabajadores, sino a todos los mexicanos”, afirmó uno de los representantes de los manifestantes.
La movilización es parte de un creciente descontento en el sector judicial, que teme que las reformas propuestas puedan afectar la independencia de la justicia en el país. Los trabajadores han hecho un llamado a la sociedad para que se una a su lucha y se mantengan alerta ante las decisiones que se están tomando en el ámbito legislativo.
¿Qué es la reforma al Poder Judicial?, la Reforma fue impulsada por el presidente del país, Andrés Manuel López Obrador y busca transformar la estructura y funcionamiento del sistema judicial en México. Los principales objetivos de esta reforma incluyen:
- Fortalecimiento de la justicia: Se propone mejorar la eficiencia y eficacia de los procesos judiciales, buscando reducir la impunidad.
- Cambio en la selección de jueces: La reforma establece mecanismos para la selección y nombramiento de jueces y magistrados, promoviendo que sean elegidos por voto popular en lugar de ser designados por el Ejecutivo.
- Reducción de corrupción: Se pretende erradicar prácticas corruptas dentro del sistema judicial, aumentando la transparencia y la rendición de cuentas.
- Creación de nuevos tribunales: La reforma incluye la creación de tribunales que se enfoquen en temas específicos, como el de justicia laboral, para abordar de manera más efectiva estos casos.
A partir de 2023, la reforma ha sido objeto de controversia y oposición, especialmente entre los trabajadores del Poder Judicial y diversos grupos de la sociedad civil. Las críticas se centran en la preocupación por la posible pérdida de independencia del Poder Judicial y el temor a que la elección de jueces por voto popular pueda politizar aún más el sistema.
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Recientemente, el Senado y la Cámara de Diputados han avanzado en la discusión y aprobación de aspectos clave de la reforma. Sin embargo, muchos servidores públicos del sector judicial, así como analistas y defensores de derechos humanos, han expresado su rechazo a estas medidas, argumentando que podrían socavar la justicia en el país.