Bonifacio Sarmiento “Don Porfirio” es uno de los tantos poblanos que recibe remesas de sus familiares en Estados Unidos. Él es originario de Huaquechula, en donde sólo hay un banco para recibir dinero en efectivo o transferencias de otro país, por lo que viaja de vez en cuando a Atlixco para poder recibir ese dinero extra que su hija le manda para que tenga una mejor calidad de vida.
Si llegan a Huaquechula y preguntan por el señor Bonifacio, es muy probable que nadie “te dé razón de él”, pero si preguntan por Don Porfirio, todos sabrán de quién se trata. Esto se debe a que sus padres lo bautizaron y registraron con dos nombres distintos y ahora tiene “el nombre oficial” y por el que los vecinos lo conocen. Es un hombre de campo, que toda su vida se ha dedicado a la tierra, pero su hija la más pequeña tenía sueños más grandes.
Su hija se llama Adelfa y cuando cumplió 15 años, le dijo a su padre que el único regalo que quería era irse a Nueva York en Estados Unidos para probar suerte y salir adelante fuera de Puebla y de México. Él le dijo que era una niña, que no podía irse, pero que, si en su cumpleaños número 18 seguía con el mismo sueño, no la iba a detener.
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Adelfa se fue a Nueva York desde los 18 años
“El tiempo pasó volando”, Adelfa cumplió 18 años y no se le olvidaron las palabras de su padre, pues le dijo que se quería ir a Nueva York. El señor Porfirio le dijo que no tenía dinero para enviarla, pero ella respondió que no estaba pidiendo dinero, sino que lo único que estaba pidiendo, era el permiso, pues ya había ahorrado para llegar al país vecino.
Siendo fiel a sus palabras, Don Porfirio la dejó ir a sus 18 años y poco tiempo después, Adelfa encontró un buen trabajo en Nueva York, se enamoró y tuvo dos hijos. Sin embargo, no ha podido regresar a Puebla debido a los temas legales. Sus hijos son los que una vez al año, visitan el país para estar con sus abuelos.
Don Porfirio le pidió a Adelfa que todo lo que ganara se lo quedara ella y su familia, sin embargo, su hija ha decidido que parte de sus ingresos también son para sus seres queridos de Huaquechula. Por ejemplo, con lo que ella ha enviado el señor se pudo comprar un tractor y una moto que es la que utiliza para movilizarse en el pueblo.
“Ya pasaron 17 años desde que mi hija se fue, ahora tiene 35 años y es muy feliz en Estados Unidos, ya me dio dos nietecitos y de vez en cuando vienen a visitarnos. Los recibimos muy contentos porque es la única forma de tener a Adelfa cerca, su otra hermana habla con ella por el teléfono, pero yo no entiendo de esas cosas, sólo me mansa sus saludos y nos apoya cada vez que la necesitamos” compartió.
Remesas le sirven para vivir porque ya no puede trabajar
Hace tiempo, el señor que se dedica al campo tuvo un accidente en su trabajo y desde ese día ya no puede caminar bien, por lo que las remesas han servido para consultas, medicamentos y hasta los bastones que ocupa para poder caminar. Y no sólo de él, sino que también el dinero que envía su hija ha servido para los medicamentos de su esposa, ya que ambos son personas de la tercera edad.
Extraña a Adelfa, la piensa todos los días, pero está contento de que haya cumplido su sueño y que esté teniendo una mejor calidad de vida en Estados Unidos. Cada que le envía “algún dinerito”, acude al Banco Azteca que está ubicado a un costado de la plaza principal de Huaquechula.
Sin embargo, al ser el único lugar en donde los ciudadanos pueden recibir remesas hay momentos en que la fila es “interminable”, por lo que se tiene que movilizar al municipio más cercano, que en este caso es Atlixco.
En la “ciudad de las flores”, hay más de 10 de lugares para recibir dinero en efectivo, cheques o transferencias de otro país. También hay que recordar que esta demarcación es la tercera a nivel estatal que captó el mayor recurso de remesas para Puebla durante el año pasado.
Atlixco, con varias casas de cambio
El Sol de Puebla realizó un recorrido en Atlixco, puntualmente en los lugares en donde se pueden recibir remesas y se pudo comprobar que el flujo es constante. Se pueden ver personas que salen y que entran de estos lugares con frecuencia, y en su mayoría son de la tercera edad.
Se pudo leer en estos lugares que no sólo hay envíos desde Estados Unidos, sino que también de Canadá y si no saben “los paisanos” cómo recibir su dinero, en estos lugares los apoyan. Tan sólo en el primer cuadro de esta ciudad se encuentra India Post, Money Exchange, MoneyGram, Dinero Express y los bancos en general que pueden recibir este dinero del extranjero.
Pese a que hay varias personas en estos lugares, al ser cuestionados por este medio se negaron a hablar. Sólo mencionaron que sí tenían familiares en Estados Unidos, pero que les han dicho que no den información a extraños. Incluso el Ayuntamiento de Atlixco platicó con El Sol de Puebla y compartió que las personas que reciben dinero son renuentes a platicar y esto se debe a que tienen miedo de ser asaltados, ya que los pobladores saben que si salen de ahí van con dinero que enviaron sus familiares.
Este 1 de febrero, El Sol de Puebla informó que el estado terminó el 2022 con un ingreso por remesas de 2 mil 745 millones de dólares, que es considerada la cifra más alta desde el año 2003, fecha que en inició el registro de información por parte del Banco de México (Banxico).
Asimismo, los cinco municipios que captaron el mayor recurso de remesas para los poblanos durante el año pasado, fueron la capital con 519 millones de dólares; 1Tehuacán, con 202 millones de dólares; Atlixco, con 198 millones de dólares; Izúcar de Matamoros, con 147 millones de dólares, y San Martín Texmelucan, con 100 millones de dólares.