En un río es en lo que se convierte la privada Rubí de la colonia Villa Margarita cada que se registra una lluvia en la capital poblana. El hecho representa un riesgo debido a que la creciente del agua alcanza hasta un metro de altura ante la falta de un sistema de drenaje pluvial efectivo para su desfogue.
A través de diversos videos que los vecinos compartieron con esta casa editorial, se pudo constatar que la cantidad de agua que se acumula es tal, que pareciera que dicha calle se transforma en el río Atoyac, pues la fuerza del caudal incluso podría arrastrar a quien intente cruzarlo.
La privada Rubí funge como un paso constante para conectar al menos a tres colonias: Villa Margarita, Nuevo Paraíso y Real de Guadalupe. Al inundarse, los vecinos prácticamente quedan incomunicados.
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Cuando la lluvia por fin cesa, la única manera que tienen para cruzar la calle, es colocándose bolsas para basura y así evitar mojarse las piernas y los pies para llegar secos a su destino.
Otra alternativa que tienen es rodear la colonia y caminar 20 minutos, lo que a su vez representa cruzar por una barranca llena de lodo.
Para hacer frente a la problemática, los habitantes se organizan para destapar la única coladera que existe en la calle, sin embargo, al no tener el equipo adecuado, corren el riesgo de ser jalados por la corriente del agua.
Pero eso no lo es todo, cuando se evapora el agua estancada, la calle donde toman el transporte público queda intransitable, ya que las capas de lodo dejan resbaladizo el lugar, con el riesgo de que las personas puedan caer.
“Todo esto se inunda, no podemos pasar, no hay acceso. Aquí pasan todo tipo de personas, hay muchos niños que tienen que cruzar para ir a la escuela y es prácticamente imposible", compartió la señora Sara Sánchez.
Es por ello que los vecinos urgen la intervención de la autoridad municipal para recibir una pronta solución, ya que a la fecha no les han dado algún resolutivo de fecha para la intervención de esta calle.
"Pedimos a las autoridades que nos escuchen. Ya están enterados del problema y nadie hace nada. Cuando llueve ya no se puede pasar, o lo tenemos que hacer por la barranca, pero ahí hay perros, está muy feo el paraje y es más peligroso", indicó Sofía Luna, vecina de la zona.
Por último, recordaron que la temporada de lluvias en la capital incrementará en las próximas semanas, por lo que insistieron en la importancia de atender esta petición ciudadana.