El caso del bebé Tadeo fue una disputa por el control dentro del penal de San Miguel, no hay motivación de drogas ni esoterismo, sólo presión de los reos para querer imponer sus propias reglas en el Cereso, así lo determinó el Gobierno de Puebla. Será este 4 de febrero cuando los implicados arranquen su proceso judicial.
“El día 2 de febrero la Fiscalía General del Estado (FGE) judicializó el complemento de la investigación de los hechos diabólicos en los cuales fue introducido al reclusorio de San Miguel un bebé exhumado de la Ciudad de México y toda esta investigación lleva soportes muy importantes y puedo decirles que no se judicializó hasta que no tuvo todas las pruebas adecuadas y su corroboración”, dijo el gobernador Luis Miguel Barbosa Huerta.
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En su habitual conferencia de prensa, el mandatario dijo que si se tardaron tanto en dar detalles del caso fue porque querían presentar pruebas científicas, periciales y hasta de vídeos, todo esto para cumplir con la orden de aprehensión en contra de dos mujeres y la imputación en contra de tres hombres más.
“Las personas judicializadas y detenidas ya introducen el cadáver del menor, hay momentos en esta cadena de hechos de cómo lo van haciendo y entonces yo repito que el papel de la autoridad es el de informar lo que es corroborarle, no la especulación, yo quiero reconocer el trabajo responsable de la FGE, la conducción de la investigación y, por tanto, desde el gobierno estamos satisfechos”, expresó.
Aunque las investigaciones continúan, Miguel Barbosa, insistió que el caso obedece sólo a una disputa por el control del reclusorio y la desestabilización del mismo. Por tanto, se mejorará la seguridad con tecnología, ya que los pasados directivos manipularon este servicio, pero hoy en día sirvió para poder identificar a los posibles culpables de este hecho.
También se remplazarán a los custodios, no a todos, pero si a aquellos que no se tenga la garantía de que estén desempeñando sus funciones de servidores públicos con legalidad y se invertirá en infraestructura para mejorar sus condiciones.
“Ya están detenidas las personas que rodearon el hecho mediante el cual se introdujo al niño al reclusorio, era un reclamo social, un compromiso de legalidad y por tanto, estamos nosotros informándolo a ustedes (…) pero con la secrecía respectiva y con esto se acredita que en Puebla no hay impunidad y para quienes hicieron alardes de gusto sobre estos acontecimientos macabros, ahí está la respuesta institucional”.
En otro tema, aprovechó para informar que en Puebla no hay denuncias de extracción de restos humanos en los panteones, pero los ayuntamientos tienen que revisar esta situación, pues es un servicio municipal. Para concluir dijo que el Gobierno del Estado está buscando recursos extras para edificar un nuevo panteón estatal.
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Hay que recordar que El Sol de Puebla ya había dado a conocer que el cuerpo de Tadeo fue trasladado 140 kilómetros desde el panteón civil San Nicolás Tolentino en Iztapalapa, Ciudad de México, donde fue enterrado el 6 de enero, hasta la cárcel de San Miguel, Puebla donde fue encontrado el pasado 10 de enero.
El menor falleció el 5 de enero a causa de problemas gastrointestinales, y un día después su familia lo inhumó en el panteón civil de Iztapalapa de donde fue desenterrado para llevarlo a la cárcel poblana.
