Puebla cuenta con un Centro de Empoderamiento Infantil, que es un modelo único para atender de manera psicológica a niñas, niños y adolescentes que vivieron violencia directa o indirecta en sus hogares o ambientes que frecuentan. Este lugar, es parte del trabajo que realiza la Secretaría de Igualad Sustantiva a favor de las mujeres y las infancias. Actualmente, atiende a 210 menores que en su mayoría, fueron víctimas de violencia psicológica.

En entrevista con este medio, Melva Guadalupe Navarro Sequeira, titular de la dependencia, dijo que el Centro es un lugar que brinda atención a los menores que fueron víctimas de violencia, pero también atienden a los que sólo fueron testigos, ya que el presenciar un acto de esta magnitud, puede traerle consecuencias negativas en el futuro.

“Lo que muy probablemente pueda suceder es que se repita este tipo de violencia y con el Centro de Empoderamiento Infantil, lo que estamos tratando de hacer es romper estos círculos de violencia y que no se normalicen. Una niña o un niño que está acostumbrado a los gritos, maltratos, ley de hielo, pues sabe que después de este momento violento, viene una etapa de luna de miel, en la que se disculpan, que se perdonan, pero se acumula tensión para otro momento y eso es parte de este círculo”, comentó.

En este sentido, el Centro tiene como meta romper la violencia circular y las psicólogas que trabajan en este espacio, les enseñan a los niños que la violencia no es normal y que cuando ellos sean grandes pueden ser diferentes y pueden tener actitudes respetuosas con sus parejas, hijos, familiares o amigos. “Es una alternativa que está al alcance de todas las personas que lo lleguen a necesitar”, compartió.

Navarro Sequeira, informó que, al día de hoy, hay 210 menores activos en el Centro y cada uno de ellos, lleva un proceso diferente, algunos acuden semanalmente, otros cada 15 días, mensualmente o acuden para contención. Esto depende de la violencia que vivieron y lo que determinen las psicólogas. (Son dos con las que se trabaja actualmente).

De los 210 menores que acuden, principalmente lo hacen por violencia psicológica, ya que han sido testigos de violencia entre sus padres y han tenido que escuchar discursos negativos en su familia, pero Melva Guadalupe, también confirmó que hay violencia física y sexual.

Es preciso mencionar que la cifra de asistentes no se mantiene a lo largo del año, ya que, en algunos casos, los padres ya no regresan al menor a su terapia o dejan de ir por diversos factores. Este Centro ya se replicó en varios estados y casi todas las Secretaría dedicadas a la mujer en el país, tienen el suyo.

“No es la atención genérica que se le da a la mujer, se necesitan psicólogas expertas en infancias y más aún, se han ido especializando en materia de acoso y los delitos que sufren las infancias de manera general y siempre con perspectiva de género”, indicó.

Desde su óptica, tener este tipo de Centro en Puebla es de suma importancia, ya que cuando una mujer vive un proceso de violencia, se llega a dar en muchos casos que ella siente que fue víctima de la agresión, cuando la realidad es que se agredió a todo su entorno. “Si bien es importante sanar a niñas y niños que han sido víctimas de violencia, también es importante que sus madres no lo vuelvan a replicar”, puntualizó.

Por su parte, la psicóloga Erika Suleim Espinoza Morales, dijo que el Centro busca salvaguardar los derechos humanos de las infancias, así como adolescencias y las actividades son diversas, pero desde que llegan les hacen entender que este es un espacio seguro, en donde podrán pintar, trabajar con sus emociones, interactuar con los juguetes sexuados, ser parte del “teatrito” y todo esto con el fin de que puedan expresar sus emociones.

“Ellos deciden con qué interactuar, cuál es el juguete que eligen en sus primeras sesiones y después de eso trabajamos los tipos y modalidades de violencia. En la Secretaría trabajamos con mujeres en situación de violencia, entonces, las mamis de ellos llegan solicitando algún tipo de atención y posteriormente ellas deciden sus hijos también requieren atención, pero lo ideal es que lo lleven juntos para que todos salgan del círculo de la violencia”, enfatizó.

Hay que mencionar que cuando una mujer llega a la Secretaría, la cual está ubicada en la calle 2 Sur con el número 902, las recibirán para abrir su expediente y la atenderán tanto la trabajadora social, la psicóloga y la abogada (en caso de recibir ayuda legal), esto con el objetivo de que todas escuchen la misma historia y no tenga que ser revictimizada una y otra vez.

La mujer y sus hijos saldrán de la dependencia con una propuesta legal para que pueda tomar una decisión, pero además de eso, saldrá con ayuda psicológica y la propuesta de ingresar a sus menores al Centro. Hay que recordar que los servicios son gratuitos y en caso de necesitar apoyo estos son los números: 911 Tel Mujer; línea directa 22 22 32 37 38; y WhatsApp 22 23 56 40 20 o 22 23 60 55 90.

Las especialistas piden que los teléfonos los guarden con otros nombres en caso de ser víctimas de violencia para su mayor seguridad.