Derivado de la pandemia del Covid 19, unas trecientas micro y pequeñas empresas han cerrado sus puertas en Cuautlancingo, dejando a más de mil 500 personas desempleadas, afirmó el director de Asesoría Financiera y de Inversión para PYME, Dionicio Cosme.
Este escenario desalentador se debe a la falta de políticas públicas aplicadas por los tres niveles de gobierno, pero en especial de las autoridades municipales por no ofrecer garantías de apoyo a los comerciantes y evitar que, con eso, el declive económico siga repuntando.
“En Cuautlancingo las garantías para las micro y pequeñas empresas son nulas, casi obsoletas, no hay protecciones para este sector que genera el 75 por ciento de empleos en México y que contribuye con el 52 por ciento del Producto Interno Bruto (PIB), pues lamentablemente el gobierno federal, estatal y municipal están asfixiándolo, porque en lugar de fomentar que estos negocios rebasen los dos años de vida promedio, favorecen el desempleo y ahora la cifra es de 2.3 millones de habitantes en esta situación en el país”, refirió el académico.
Dionicio Cosme, también criticó que en esta jurisdicción y en el resto del territorio mexicano, se enfrenta con apatía y desinterés la pandemia del Covid 19, porque en el 2009, cuando sucedió la contingencia sanitaria por la Influenza AH1N1, se aplicaron protocolos de desinfección en sitios de riesgo, mientras que, en la actual, el gobierno local toma a la ligera el tema, el estatal invita a comer un caldo de guajalote para enfrentarla y el federal, dice que no pasa nada.
“Lo que veo en Cuautlancingo es que necesitamos fortalecer las medidas sanitarias y tener un compromiso real, porque el gobierno nos ha quedado a deber, la gente anda relajada con el tema de la contingencia y necesitamos hacer conciencia de que ésta nos pega a todos y debemos fortalecer la sociedad, porque viene una etapa de disolución social y debemos cerrar filas como una sociedad unidad que solvente los problemas económicos, de salud, pero también de inseguridad”, externó.
De no existir políticas públicas enfocadas a realmente lograr una reactivación económica, Cuautlancingo enfrentará un escenario económico desalentador, pues, aunque cuenta con corredores industriales, éstos emplean a personas foráneas porque no hay programas de capacitación en apoyo de los habitantes para competir por un espacio laboral.
“En estos momentos, los amantes de la cuarta transformación piensan que tenemos un gobierno de primer mundo, cuando la recesión económica y el desempleo están presentes y cuando un doble lenguaje desde el gobierno federal no garantiza acciones que impulsen el campo y la industria de la transformación, que son ejes básicos para generar empleo”, concluyó.
Es importante decir que en torno a la postura del académico, micro y pequeños empresarios de Cuautlancingo, señalaron que aun cuando sus negocios estuvieron cerrados por más de seis meses, no existen estímulos fiscales en el pago de sus refrendos e impuestos, pese a la lenta reactivación económica que tiene lugar en esta jurisdicción.