Lesiones en la columna, cadera o rodillas, así como malas posturas al caminar es parte de las complicaciones que puede provocar el exceso de peso en las mochilas escolares.
A unas semanas del regreso a clases es importante conocer las recomendaciones que las instituciones de salud hacen para evitar complicaciones y lesiones en los estudiantes.
El Instituto del Seguro Social (IMSS) asegura que los padres de familia deben cuidar que la mochila no exceda el 10 por ciento del peso de los niños, es decir, que si el menor pesa 30 kilogramos, su mochila no deberá sobrepasar los tres kilogramos.
Otra recomendación que el instituto hace es que las mochilas tengan correas anchas y acojinadas, proporcionales a la talla de los pequeños para que no les queden holgadas, de tal forma que al ajustarse a su espalda queden cinco centímetros arriba de la cintura.
A la par, sugiere que los niños carguen la mochila en ambos hombros para distribuir el peso de manera adecuada y evitar trasportar artículos innecesarios.
Del mismo modo es importante cuidar las condiciones en las que el escolar carga sus materiales, ya que es común que para compensar el equilibrio con relación al peso de la mochila, el infante se encorve hacia adelante al momento de caminar, situación que puede ocasionar mayor contractura, ya que se está forzando al cuerpo a trabajar de forma incorrecta
LESIONES ASOCIADAS AL MAL USO
El instituto detalla que, aunque el niño no manifieste dolores, los daños pueden aparecer años después, haciéndolo propenso a lesiones en la columna, cadera o rodillas, que, si no se detectan o tratan a tiempo, pueden tener consecuencias irreversibles como las siguientes:
Cifosis: desviación de la columna en forma de joroba en la zona dorsal. Se evita usando las cintas largas para que el peso se cargue en la zona lumbar.
Escoliosis: desviación lateral de la columna en forma de "S". Se evita distribuyendo el peso sobre los hombros.
USO CORRECTO DE LA MOCHILA
La postura del niño debe permanecer erguida y sin encorvarse.
La mochila debe ir pegada al cuerpo en la zona lumbar.
Nunca usar la mochila con un solo tirante.
El tamaño no debe ser superior al torso del niño.
Los objetos pesados deben quedar próximos al cuerpo.
Se recomienda el uso alternativo de maletas con ruedas; la forma correcta es llevarla hacia adelante.