En San Francisco Totimehuacan permanecen los vestigios abandonados de cinco pirámides de 3 mil años de antigüedad, y aunque la Asociación Tepalcayotl ha buscado proteger la zona arqueológica mediante el cambio de uso de suelo, no han conseguido una respuesta sólida del Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH).
Tras la inacción del INAH, la asociación civil se unió con diversas organizaciones a favor de la preservación del medio ambiente para presentar el proyecto de Rescate y Preservación de la Zona Arqueológica y Ecosistema del lugar, abandonado desde los años sesentas.
Las solicitudes que los defensores de Tepalcayotl hacen a las autoridades comienzan por verificar el uso de suelo de Tepalcayotl de Periférico y Valsequillo y en el Barrio de Santa Catarina, en la Junta Auxiliar de San Francisco Totimehuacan, que pertenece al Municipio de Puebla.
En consecuencia del abandono a la zona, personas han querido invadir los terrenos de más de cien hectáreas donde se postran las pirámides prehispánicas, resultando en la pérdida total de una de ellas, en la zona conocida como Tepalcayucan.
El problema más grave para Tepalcayotl, señala Brandon W., es que los vecinos de las cuatro pirámides de Tepalcayucan ya han lotificado sobre una de ellas con la intención de construir casas y sólo esté acto, “acabó con 3 mil años de historia”, dice frente al terreno plano donde antes se podía ver la construcción antigua.
Sobre el suelo delimitado con postes de cemento pintado, abundan los tepalcates, fragmentos de recipientes de barro que fueron utilizados por las culturas prehispánicas que ahí habitaron.
También, en la construcción más alta, una familia colocó su casa en el segundo piso al que, incluso, suben automóviles dañando la estructura milenaria, frente a ello, el mayor temor de la asociación es que se decidan por construir cimientos actuales sobre la gran pirámide.
Es justamente en la construcción central, Tepalcayotl, que se encuentra una caverna donde fue hallado un altar con restos humanos que datan de los años 600 antes de Cristo; mismos que ahora se encuentran en Alemania debido a que ese es el origen del “descubridor”, denunció Brandon.
La cámara subterránea ahora es usada por los vecinos de la Zona Arqueológica como basurero, pues son integrantes de la organización Jaguares, quienes se encargan de limpiar las profundidades del lugar, sacando de ahí, animales muertos.
A unos pasos de gran pirámide de Tepalcayotl se observa una excavación “a medias”, que los defensores de la historia señalan que solía ser un cementerio prehispánico, pues fue donde más tepalcates de vasijas y restos humanos fueron encontrados.
Sin embargo, éstos vestigios de la historia prehispánica en Puebla se han perdido, pues la excavación a la vista no se hizo con fines de estudio, sino de saqueo. Así que, aunque tienen conocimiento que algunos vecinos conservan parte de ellos, desconocen la ubicación de la mayoría.
Por otra parte, en la zona conocida como Ahuantepec, un particular ha lanzado escombros desde lo alto del Periférico Ecológico hasta llegar a una parte de la pirámide que se postra debajo desde hace miles de años, cubriéndola, estiman, para construir después sobre ella.
Es en este tema el único en el que han conseguido respuesta de las autoridades, pues el secretario de la Asociación Tepalcayotl señaló en entrevista, que se les prometió que dicha situación se detendría, aunque, lejos de voltear la vista a la zona arqueológica, les solicitaron mantenerse vigilantes del cumplimiento de esta promesa.
De esta manera, el proyecto que la Asociación quiere realizar a favor de esta parte de la historia prehispánica de Puebla, incluye la instaurauración del dictamen de Zona Arqueológica de parte del INAH con la intención de protegerla a la vez de convertir las hectáreas abandonadas en un parque turístico.
En ese sentido, apuntaron que los vecinos del lugar se han manifestado a favor del proyecto, e incluso, de devolver las posiciones al parque si se instala un museo comunitario en el Lugar.