Con 18 defunciones derivadas de complicaciones por la Covid-19, Puebla ocupa el tercer lugar a nivel nacional en muertes de sacerdotes y religiosos durante la pandemia, de acuerdo con el último informe presentado por el Centro Católico Multimedial, con corte al pasado 14 de enero.
La arquidiócesis de México encabeza la lista de defunciones de sacerdotes a causa del SARS - CoV - 2 con 28 casos, seguida de la de Guadalajara con una cifra similar; mientras que las de Texcoco, Valle de Chalco, Piedras Negras e Iztapalapa ocupan los últimos lugares con cinco muertes cada una.
El Centro Católico Multimedial señaló que entre octubre de 2021 y la fecha en que se emite su último informe no se registraron defunciones de sacerdotes en Puebla a causa de la pandemia, sin embargo dio a conocer la lista de quienes murieron en los meses previos.
Se trata de los presbíteros José Guadalupe Sanguino Fuentes, Valentín Ramírez Tlahque, Álvaro Ramírez Hernández, Juan Francisco Espino Godínez, Joaquín Fausto Silva Omaña, Rafael Amaro Goiz, Adán Soto Aguilar, José Amado Guillermo López Téllez, Rubens Mendoza González.
Asimismo, Luis Ruíz Vázquez, Froylan Ramírez Espinosa, Víctor Castillo Deonate, Felipe Manuel Alonso Valdés, Andrés Cabrera Tlaxmacótl, Felipe Carrera Merino, Froylan González Pérez, José Antonio Espinosa Sánchez y Luir Alberto Loyola Santiago.
El Centro destaca que su último informe se emite dentro de la cuarta ola de contagios provocada por la variante ómicron, que ha obligado a la iglesia a reforzar las medidas de prevención pero con menor dureza respecto a las olas previas, porque la vacunación contra el SARS- CoV - 2 fue efectiva para lograr la confianza en la congregación de personas.
“En el clero mexicano, se llega a la fatídica cifra de 294 obispos, sacerdotes, diáconos y religiosas que han perdido la vida a causa de la enfermedad de la Covid - 19” señaló al tiempo de admitir que podría haber más defunciones sin contabilizar en el país porque podría ignorarse si la causa de muerte fue el virus.
Por último, desglosó que de la cifra de defunciones siete fueron de obispos, 264 de sacerdotes o religiosos, 13 de diáconos permanentes y 10 religiosas.