Con el objetivo de protegerse de abusos de la autoridad, delabandono de la empresa y para mejorar el servicio, sociosconductores de Uber integrarán una organización de choferes deservicio de transporte ejecutivo.
Manuel Calderón Castro y Luis Héctor Ampudia, quienes seidentificaron como miembros de la próxima organización,anunciaron que conformarán una asociación civil para promovermejores condiciones de trabajo y respeto para su oficio, puesacusaron que aunque José de Jesús “N”, socio conductor deUber, está implicado en el homicidio de la joven universitariaMariana Fuente Soto, ellos también han sido víctimas de actosviolentos y de delincuentes.
Como ejemplos, Calderón Castro se refirió a los operativosarbitrarios practicados por personal de la Secretaría deInfraestructura, Movilidad y Transportes (SIMT), así como a lasagresiones que les han propinado los taxistas tradicionales.“Somos respetuososde la ley y no queremos transgredirla, pero que tampoco transgredannuestros derechos como seres humanos, porque eso de llegar 10, 11efectivos y someter a un compañero no es lo correcto”,abundó.
Y es que, admitió, aunque Uber es la empresa mediante la quetrabajan, tampoco los defiende, pues no tienen relación laboralcon ella, de modo que no son sus empleados ni está obligada ainterceder por ellos.
Además, subrayó, como asociación civil, estarían dispuestosa participar en la valoración de medidas de seguridad como las quepretende establecer el Gobierno del Estado para mejorar elservicio. “Nosgustaría entrar en mesa de diálogo, como dijo el día de ayer elgobernador Tony Gali, para discutir y que nos tomen en cuenta comoconductores porque nosotros tenemos la experiencia”,completó. En este sentido, ambosconsideraron que se deben aplicar mejores medidas de seguridad quela obligatoriedad de licencia mercantil para conducir, puesaseguraron que esta no garantiza la seguridad y también llamaron alas autoridades a reconocer que la delincuencia no es exclusiva delsector del transporte, sino que se ha generalizado en laentidad.
Finalmente, los dos también coincidieron en que el diputadolocal Leobardo Soto Martínez no debe descalificar ni exigir larevocación del permiso de Uber, sino que, en congruencia con lapresidencia de la Comisión de Trabajo del Congreso del Estado queostenta, debería tratar de conservar y procurar los empleos oautoempleos que existen en la entidad, como es el caso de ellos,que invirtieron para trabajar con Uber.
