En el cuarto trimestre de 2018, la tasa de informalidad laboral en Puebla fue del 73.4 por ciento, cifra más alta respecto al tercer trimestre del mismo año, de un 72.3 por ciento, informó el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi). Esto significa que 73 de cada 100 personas con un empleo, carece de seguridad social, e incluso de otras prestaciones, pese a estar laborando para negocios o empresas constituidas.

A la par de que este indicador aumentó, también la tasa de personas ocupadas en el sector informal creció en el estado, al pasar de una tasa de 33.4 por ciento trimestral, a una tasa del 36.1 por ciento. Esta cantidad representa a la población que trabaja en unidades económicas que no están constituidas como empresas, tal como los negocios ambulantes.

En el tercer trimestre de 2018 se registró una población ocupada de 2 millones 762 mil 119 personas, de las cuales un millón 997 mil 012 (lo que correspondió al 72.3 por ciento) laboraba sin tener seguridad social. En Puebla, ejemplos de empresas que operan de esta manera son algunos telemarketing, medios informativos, distribuidoras de alimentos no procesados, en la agricultura o los pequeños negocios, como pastelerías, dulcerías, lavanderías o taquerías, que contratan a personal con un sueldo quincenal, pero sin ofrecerle certeza laboral ni acceso a servicios de salud.

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Para el cuarto trimestre del 2018, el Inegi registró una población ocupada correspondiente a 2 millones 777 mil 999 personas en Puebla, de las cuales hubo un 73.4 por ciento en la informalidad laboral, es decir, sin algún tipo de protección de seguridad social y, regularmente, sin otras prestaciones como derecho a vivienda, vacaciones o contrato laboral.

El Inegi señala que el empleo informal incluye las categorías “trabajo no protegido en la actividad agropecuaria, el servicio doméstico remunerado de los hogares, así como los trabajadores subordinados que, aunque trabajan para unidades económicas formales, lo hacen bajo modalidades en las que se elude el registro ante la seguridad social”.

EMPLEO CLANDESTINO CRECE

Dentro de los datos que publicó el Inegi este 14 de febrero, se puede apreciar que también la ocupación en el sector informal aumentó, pues pasó del 33.4 por ciento, en el tercer trimestre de 2018, a un 36.1 por ciento en el cuarto trimestre del mismo año.

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En otras palabras, durante el tercer trimestre del año se registraron 922 mil 547 empleos de este tipo, mientras en el siguiente trimestre, la cifra fue de un millón 002 mil 857 personas.

El Inegi describe a la ocupación en el sector informal como “la población ocupada que trabaja para una unidad económica que opera a partir de los recursos del hogar, pero sin constituirse como empresa, de modo que la actividad no tiene una situación identificable e independiente de ese hogar”, por lo que esta área puede incluir a las trabajadoras del hogar o el ambulantaje.