De 2020 a 2022, la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena) incrementó 571 por ciento el aseguramiento de tomas clandestinas en el estado de Puebla. Según un reporte elaborado por la dependencia federal, los municipios más afectados por este delito, tan sólo el año pasado, fueron Tepeaca, San Martín Texmelucan, Acajete y Los Reyes de Juárez.
Mediante una solicitud de información hecha a través de la Plataforma Nacional de Transparencia (PNT), la Sedena dio a conocer que 2022 fue el año de mayor incidencia del último trienio, en cuanto al hallazgo en flagrancia de tomas clandestinas de combustible y gas LP en la entidad poblana.
Concretamente el año pasado personal militar aseguró un total de 517 tomas ilegales. Un año atrás fueron 500, sin embargo, en 2020 la cifra fue de apenas 77. Por lo tanto, el crecimiento en la ocurrencia de esos actos fue de poco más del 500 por ciento.
Respecto a los municipios en los que fueron detectadas dichas tomas ilícitas en 2022, la dependencia que encabeza Luis Cresencio Sandoval González detalló que los más afectados, únicamente por el robo de gas LP, fueron Tepeaca, San Martín Texmelucan, Acajete, Los Reyes de Juárez y San Matías Tlalancaleca. En su conjunto, acapararon 222 eventos de esa índole.
Por su parte, las demarcaciones que presentaron el mayor número de aseguramientos, pero únicamente de tomas ilícitas de combustibles, fueron –nuevamente–, San Martín Texmelucan, Tepeaca, Acajete, San Matías Tlalancaleca, Los Reyes de Juárez, así como Palmar de Bravo y Amozoc. Todas ellas acumularon 138 eventos, de los 517 que atendió la Sedena entonces.
En cuanto a los años 2020 y 2021, el reporte de la Sedena destacó que las alcaldías que tuvieron más tomas aseguradas por personal militar fueron Huauchinango, Tepeaca, Xicotepec, San Martín Texmelucan, Tlahuapan, Acatzingo y San Matías Tlalancaleca.
Cabe destacar que la dependencia federal hizo hincapié en que los eventos cuantificados en dicho reporte contemplan únicamente los casos en que el Ejército Mexicano realizó aseguramientos en flagrancia.
No hay que olvidar que El Sol de Puebla dio a conocer el año pasado que Petróleos Mexicanos (Pemex) reportó que el robo de hidrocarburos le generó pérdidas por hasta 39 millones de pesos, tan sólo durante los primeros tres trimestres de 2022. En otras palabras, según información de dicha institución, los contribuyentes pagaron alrededor de 50 mil pesos por cada toma clandestina asegurada por las autoridades federales.