El terremoto del 19 de septiembre de 2017 evidenció la necesidad de perfeccionar los protocolos de prevención y reacción ante sismos, principalmente entre los jóvenes que no habían experimentado un fenómeno natural como este, sostuvieron Hugo Ferrer y Eduardo Ismael Hernández, profesores de la Facultad de Ingeniería Civil de la UPAEP.
En la víspera del primer año del temblor Hugo Ferrer destacó que muchos jóvenes que no vivieron el sismo de 1999 hace un año justamente no participaron con la debida seriedad en los simulacros que se celebraron minutos antes del terremoto y luego comprobaron la importancia de estar preparados ante una situación como esa.
Además, consideró que es necesario que las medidas de precaución y evacuación que se han dictado hasta la fecha sean revaloradas, pues recordó que hace un año muchas de las víctimas fallecieron tras desalojar los edificios en los que se encontraban: “en muchos de ellos no hubiera sido una catástrofe o una fatalidad si hubieran seguido un protocolo que no conocieron o que, como en otros países, lo primero que se hace es cubrirse la cabeza con algo que se tenga a la mano, como lo que pasa en Japón o en diferentes ciudades con sismicidad mayor”, completó.
Mientras tanto, revelaron que la UPAEP trabaja en dos investigaciones sobre eventos sísmicos, una propia basada en datos recabados en 10 inmuebles escolares, de diferentes antigüedades, y otra en colaboración con la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM), cuyos resultados se publicarán el día de hoy en el Simposio de Ingeniería Sísmica UPAEP 2018 “7:19S Lecciones Aprendidas y Retos Después de los Sismos”.