Las clases a distancia, y por televisión principalmente, están condenadas a un limitado y deficiente aprendizaje, toda vez que profesores de telesecundarias y telebachilleratos han demostrado que la experiencia que han tenido frente a los televisores, no ha sido suficiente, por muy bien estructurado que esté el contenido, afirma Rodolfo Cruz Vadillo, investigador de la Facultad de Educación en UPAEP.
A tres días de haber comenzado con este nuevo sistema de aprendizaje no presencial, alumnos, padres de familia y profesores, han vivido la experiencia de un sistema carente de interacción, en medio de la confusión y las fallas que se han presentado durante las horas de trabajo.
Y es que, si bien, el tema del curso escolar 2020-2021 –debido a la pandemia por coronavirus- el gobierno federal lo resolvió para que los más de 30 millones de estudiantes en México lo pudieran recibir desde casa y a través de la televisión abierta para las escuelas públicas, el experto consideró que fue una estrategia errónea y mal planeada, por el tema de la desigualdad social y económica que hay en el país y también por pensar que este medio podría sustituir al acto educativo.
“Podríamos pensar que ya está resuelto el problema de la educación, pero no es así porque si solo se tratara de que los contenidos atractivos fueran los suficiente para que un chico se eduque, pues no habríamos necesitado construir escuelas, ni nada”, afirma Cruz Vadillo.
Por otra parte, asegura que la enseñanza necesita de muchas otras cosas que solo tener el acceso al conocimiento a través de internet, televisión, radio, libros de texto gratuito o cuadernillos, sin embargo, aún faltan elementos para acompañar el acto educativo como son: la motivación y la retroalimentación por parte del personal docente, así como la construcción de relación, maestro-alumno y alumno-maestro.
“Un chico aprende, no solo por la información que le llega en su momento, sino por una serie de ambientes, condiciones, situaciones y relaciones con los otros que estaban presente en la escuela”, asevera.
LOS PROFESORES SE PONEN LA CAMISETA CON SUS ALUMNOS
A pesar de que el modelo a distancia “Aprende en Casa II” se basa en la transmisión de contenidos educativos por televisión, existen maestros que se preocupan porque sus estudiantes puedan recibir el conocimiento adecuado para enfrentar esta situación.
Ante este escenario, Enrique Moro Pérez Lara, profesor de quinto de primaria en la Escuela José Mariano Jiménez, ha decidido abrir un canal de Youtube –titulado Profe Kike- para que sus 37 nuevos alumnos puedan reforzar los conocimientos de matemáticas que se van a adquirir en este grado, pues alega esta etapa es un poco difícil por las nuevas enseñanzas, principalmente en dicha materia.
“En mi caso cree un canal de Youtube donde me grabo explicando los temas de matemáticas y trato de hacerlo lo más amigable posible, porque ahí si necesitan ver los ejemplos o ver que alguien lo pueda hacer y no se les haga tan complicado”, confiesa de su cuenta que creó hace tres semanas y que hasta el momento tiene 6 videos.
La idea de este espacio, nació a raíz del Consejo Técnico que recibió en días pasados al ver los temas que se deben de impartir en el grado que le tocó, por lo que se le ocurrió hacer sus videos, tomando como estrategia la moda de los “youtubers”. “Me pareció que podía resultar atractivo para los niños y de esta manera lo entendieran un poco mejor. Hasta ahorita ha sido una buena experiencia porque he recibido comentarios de mamás que dicen que sus hijos les han entendido, además de que les parecen útiles”, comparte.
Aparte de esta innovadora estrategia, Enrique junto con otras dos compañeras de trabajo: Margarita Tapia Limón y Aidé Rodríguez Herrerías (quienes también fungen como maestras de quinto grado) diseñaron unos manuales que les harán llegar a los niños semanalmente –vía WhatsApp-, con actividades de todas las materias para fortalecer los conocimientos que aprenderán a través de los contenidos televisivos y de las tres clases por semana que podrán impartir por internet (con duración de una hora cada una).
Patricia Benítez Chávez, profesora del segundo grado de primaria del Colegio Nuevo Milenio, es otra compañera del gremio que, a pesar de pertenecer a un sistema de escuela que se da por medio de la plataforma Zoom, también se ha entregado a su labor montando su propio espacio para dar la bienvenida a sus 25 nuevos pequeños.
La mitad de lo que es la sala de su casa, entre la cocina y sus cuartos, se ha transformado en una pequeña aula que se acompaña de un escritorio y un mural con diferentes figurillas en donde se lee la palabra “bienvenidos”.
“Primero fue buscar un espacio para poder impartir la clase y fue un punto muy importante porque tuvimos que hacer adaptaciones en casa. Para mí no fue difícil porque en la escuela estamos acostumbradas a poner frisos y se me ocurrió poner uno aquí atrás, para saludar a mis alumnos de nuevo ingreso”, platica.
El amor y entrega que le tiene a su profesión, lo demuestra a través de la paciencia y el cariño con el que atiende a sus estudiantes a través de la pantalla, pues a pesar del caos que vive en medio de las dudas, los micrófonos encendidos y los constantes “miss ya acabé” de sus chiquitos, Patricia les contesta con amabilidad y con una sonrisa en el rostro.
REZAGO ESCOLAR PODRÍA SURGIR A CAUSA DE LA ENSEÑANZA A DISTANCIA
Meses de aprendizaje lento para los alumnos y horas de trabajo adicionales para el personal docente, son tan solo algunos de los problemas que vislumbran Patricia y Enrique en el nuevo panorama del sistema educativo con el comienzo de cursos para este ciclo escolar.
De acuerdo a Benítez Chávez, declara que uno de los obstáculos que hasta el momento se prevé en el sistema a distancia es que probablemente no se cumplan las metas de aprendizaje.
“Yo pienso que los objetivos no se van a lograr, el sistema es lento, trabajamos poco, entonces es difícil y yo creo que los logros no se van a lograr al cien por ciento, considero un 70 por ciento si bien nos va”, comenta.
Por su parte, Pérez Lara, advierte que el rezago escolar se puede hacer presente en este sistema, sin embargo, sugiere que una vez que se regresen a clases presenciales será necesario recurrir exámenes de diagnóstico para detectar los problemas de aprendizaje y así nivelar dependiendo del grado en el que estén.
En la experiencia de Patricia, los primeros días de actividades han sido un poco difíciles, pues testifica que, al ser un nuevo grupo, es muy difícil conocerlos a través de una computadora. El profesor Enrique concuerda con este punto de vista, pues él, hasta el momento solo ha tenido un encuentro con sus alumnos a través de Zoom.
En otros temas, la también ama de casa afirma que, a pesar de estar trabajando en el hogar, su jornada de extiende más, pues aparte de cumplir con su horario, de 8:00 a 14:15 horas, por las tardes tiene que atender dudas de padres de familia y organizar su trabajo del día siguiente. Y ya ni se diga del profesor Moro, quien además de realizar los manuales, también tendrá que destinar más tiempo para crear sus contenidos de Youtube.
A pesar de las circunstancias negativas que ambos maestros puedan encontrar en este sistema, ambos coinciden en que, tanto ellos como los demás profesores, tienen que adaptarse e innovar en estrategias tecnológicas para velar por la educación de sus escolares.
