Aunque las autoridades estatales han asegurado que no es un programa recaudatorio, las fotomultas dejaron a Antonio Gali Fayad recursos por el orden de los 139 millones 580 mil 313 pesos durante sus 22 meses de gobierno.
En promedio, la administración estatal percibió 6.3 millones de pesos mensualmente. Apenas el pasado 4 de diciembre, durante su comparecencia ante el Congreso del Estado, el secretario de Finanzas y Administración (SFA), Enrique Robledo Rubio, informó que estos recursos se destinan a los rubros de educación, seguridad y educación.
Bajo el argumento de que la Secretaría de Seguridad Pública fue la que firmó el contrato con Autotraffic, que es la empresa que aplica las fotomultas, el funcionario se negó a responder ese día qué porcentaje de lo recaudado se le queda a la compañía.
De la gestión de Gali Fayad, marzo de 2017 fue el mes donde se registró la mayor recaudación por este programa cuyo nombre correcto es Monitor Vial, con el cual supuestamente se busca disminuir el número de accidentes por el exceso de velocidad de los vehículos.
El incremento de marzo se debe a que fue el último mes que los poblanos tuvieron para pagar el control vehicular para que no se les activara la tenencia y para ello debían estar al corriente en sus pagos vehiculares, como por ejemplo no tener fotomultas.
El programa de las fotoinfracciones fue implementado en agosto de 2013 por parte del gobierno de Rafael Moreno Valle Rosas, quien, a pesar de las críticas, aseguró que no tenía fines recaudatorios.
En el mes de octubre de este año, el gobierno estatal comenzó a aplicar fotomultas a los vehículos foráneos pues detectó que automovilistas poblanos estaban emplacando en otros estados, como en Tlaxcala, para evadir dichas infracciones. No obstante, el gobernador del estado vecino, Marco Mena Rodríguez, dijo que ello no es posible hasta que se firme un acuerdo.