/ sábado 18 de junio de 2022

'Derechos iguales para todas las diversidades', exige comunidad LGBT+ en Marcha del Orgullo

Este año se buscó visibilizar las infancias trans y aplaudir la prohibición de las terapias de conversión

La Marcha del Orgullo: para unos, un momento de liberación, para otros, sigue siendo una movilización llena de polémica, pero no cabe duda que ver a varias personas de la comunidad LGBTTTIQ+ alzando la voz, es una gran muestra de la reivindicación de los derechos humanos. Es por ello, que este 18 de junio se llevó a cabo la tradicional caminata en Puebla, este año, con el objetivo de visibilizar las infancias trans y aplaudir la prohibición de las terapias de conversión.

Bebés, niños, niñas, adolescencia, juventud, gente de edad adulta, con discapacidad y hasta personas de la tercera edad, fueron los que acudieron. Para esta marcha no hay una regla específica, todos llegaron con un fin en común, ser visibilizados y mostrarse tal y como son: como seres humanos.

No hay una cifra concreta de cuántas personas acudieron al Parque Juárez, que fue donde inició la marcha, pero se aproximaron alrededor de siete mil; siete mil corazones que se unieron para exigir “un mundo en donde el amor no se esconda en el armario” y un “mundo con más derechos y menos odio”.

De acuerdo con el área de comunicación social del Ayuntamiento de Puebla al concluir el evento en el zócalo, sí se registraron un aproximado de 7 mil personas, cuando el Colectivo de la Marcha del Orgullo había hecho un estimado de 15 mil asistentes.

Fue en punto de las 15:47 horas cuando la marcha arrancó y todos los integrantes corearon “¿A quién le importa?”, de la cantante Thalía: “¿A quién le importa lo que yo haga?, ¿a quién le importa lo que yo diga? ¿Yo soy así y así seguiré, nunca cambiaré?”.

Otras de las canciones más cantadas fue la de “Todos me miran” de Gloria Trevi, en donde algunos de los asistentes, como dice la canción, soltaron algunas lágrimas: “Tú me hiciste sentir que no valía y mis lágrimas cayeron a tus pies. Me miraba en el espejo y no me hallaba, yo era sólo lo que tú querías ver…y me solté el cabello, me vestí de reina, me puse tacones, me pinté y era bella”.

María José Serrano del colectivo que organiza la marcha recordó que esta movilización se remonta a 1969 cuando en el bar Stonewall de Nueva York se generaron unos disturbios de odio y dieron pie a que la comunidad alzara la voz. De igual modo, dijo que este año y en esta marcha, faltaron muchas personas, ya que “las desigualdades” se los llevaron antes de tiempo e hizo un pase de lista.

“Hoy salimos a las calles por todas, todos y todes presentes y quienes nos faltan (…) Estamos aquí gays, lesbianas, bisexuales, trans, asexuales, no binaries, las trabajadoras sexuales, las personas con VIH, las personas con discapacidad, quienes paternamos y maternamos, nuestras familias sanguíneas y de vida y a quienes convertimos en una, les amigues, los afros, indígenas. Todos, celebremos la vida, el encontrarnos, mirarnos y abrazarnos”, externó.

Fue así que comenzó la caminata, las calles de la zona Dorada de Puebla se llenaron de los colores de la bandera LGBT, pero a diferencia de otros años, también tuvieron mucha presencia los colores blanco, rosa y azul que representan a la comunidad transgénero.

Los asientes no solo caminaron, sino que se trasladaron en patines, patinetas y scooters; algunos llevaron a sus perros, se caracterizaron de algunos personajes de anime y algunas películas animadas. Todos juntos se tomaron de la mano y gritaron: “Derechos iguales a lesbianas y homosexuales”. El recorrido se dio en el bulevar 5 de mayo, enfrente de Plaza Dorada y siguió así hasta la 7 Oriente para poder llegar al zócalo capitalino.

Estuvieron presente los carros alegóricos, en donde no pudieron faltan las famosas drag queens, símbolo de la libertad de expresión, símbolo de la comunidad y una muestra del arte escénica. Ellas se mostraron con sus vestidos grandes y su maquillaje que tanto las caracteriza, la gente les pidió fotos y ellas accedieron con una gran sonrisa.

Durante todo el trayecto, hubo personas regalando preservativos, quienes se unieron a la marcha y aplaudieron todas las porras, pero al mismo tiempo, se vio un gran número de elementos de la Secretaría de Seguridad Pública (SSP), en su mayoría mujeres, quienes con cascos y su equipo de seguridad rodearon la zona. De igual modo, se pudieron ver trabajadores de la Comisión de Derechos Humanos (CDH).

Fueron muchas las consignas, como: “Dios también hizo sacerdotes gays”, “Derechos iguales para todas las diversidades”, “vivan las infancias LGBT”, “a tu joteria le falta antirracismo”, “nada sobre nosotros, nada sin nosotros”, “era hetero, pero me chingué la rodilla”, “respeta mis derechos”, entre muchas otras.

La marcha también fue aprovechada por comerciantes, quienes vendieron banderas de los colores LGBTTTIQ+, coronas como si fueran de reyes, coronas con flores, flores hechas de estambre, stickers, collares, brillos para la cara, cubrebocas y un sinfín de artículos relacionados con el mes de orgullo.

A diferencia de años pasados, no se vieron personas que amedrentaron a los asistentes, al contrario, hubo señoras que en cartulinas expresaron apoyo a los jóvenes que en su casa son rechazados por ser gay. También salieron de negocios para felicitarlos, otros pidieron fotos a las Drag Queens o pasaban en sus coches y los apoyaban con el claxon. Sólo al llegar al primer cuadro de la ciudad se generó caos vial, pero en ningún momento les faltaron al respeto.

Al llegar a la plancha del zócalo ya los esperaban los organizadores del evento, quienes gestionaron un concierto y varias actividades para seguir conmemorando esta fecha, que es una de las más importantes de la comunidad, pues es muestra de que Puebla cada vez es un estado más libre y con menos sociedad conservadora.

En el zócalo de la ciudad si bien hubo mucha fiesta, también hicieron un espacio para exigir políticas públicas que atiendan a la población LGBTTTIQ+, pero con un enfoque interseccional, pidieron el reconocimiento a las infancias y juventudes trans, así como educación sexual desde una mirada diversa. Para concluir exigieron un alto a los crímenes de odio y a la discriminación.


La Marcha del Orgullo: para unos, un momento de liberación, para otros, sigue siendo una movilización llena de polémica, pero no cabe duda que ver a varias personas de la comunidad LGBTTTIQ+ alzando la voz, es una gran muestra de la reivindicación de los derechos humanos. Es por ello, que este 18 de junio se llevó a cabo la tradicional caminata en Puebla, este año, con el objetivo de visibilizar las infancias trans y aplaudir la prohibición de las terapias de conversión.

Bebés, niños, niñas, adolescencia, juventud, gente de edad adulta, con discapacidad y hasta personas de la tercera edad, fueron los que acudieron. Para esta marcha no hay una regla específica, todos llegaron con un fin en común, ser visibilizados y mostrarse tal y como son: como seres humanos.

No hay una cifra concreta de cuántas personas acudieron al Parque Juárez, que fue donde inició la marcha, pero se aproximaron alrededor de siete mil; siete mil corazones que se unieron para exigir “un mundo en donde el amor no se esconda en el armario” y un “mundo con más derechos y menos odio”.

De acuerdo con el área de comunicación social del Ayuntamiento de Puebla al concluir el evento en el zócalo, sí se registraron un aproximado de 7 mil personas, cuando el Colectivo de la Marcha del Orgullo había hecho un estimado de 15 mil asistentes.

Fue en punto de las 15:47 horas cuando la marcha arrancó y todos los integrantes corearon “¿A quién le importa?”, de la cantante Thalía: “¿A quién le importa lo que yo haga?, ¿a quién le importa lo que yo diga? ¿Yo soy así y así seguiré, nunca cambiaré?”.

Otras de las canciones más cantadas fue la de “Todos me miran” de Gloria Trevi, en donde algunos de los asistentes, como dice la canción, soltaron algunas lágrimas: “Tú me hiciste sentir que no valía y mis lágrimas cayeron a tus pies. Me miraba en el espejo y no me hallaba, yo era sólo lo que tú querías ver…y me solté el cabello, me vestí de reina, me puse tacones, me pinté y era bella”.

María José Serrano del colectivo que organiza la marcha recordó que esta movilización se remonta a 1969 cuando en el bar Stonewall de Nueva York se generaron unos disturbios de odio y dieron pie a que la comunidad alzara la voz. De igual modo, dijo que este año y en esta marcha, faltaron muchas personas, ya que “las desigualdades” se los llevaron antes de tiempo e hizo un pase de lista.

“Hoy salimos a las calles por todas, todos y todes presentes y quienes nos faltan (…) Estamos aquí gays, lesbianas, bisexuales, trans, asexuales, no binaries, las trabajadoras sexuales, las personas con VIH, las personas con discapacidad, quienes paternamos y maternamos, nuestras familias sanguíneas y de vida y a quienes convertimos en una, les amigues, los afros, indígenas. Todos, celebremos la vida, el encontrarnos, mirarnos y abrazarnos”, externó.

Fue así que comenzó la caminata, las calles de la zona Dorada de Puebla se llenaron de los colores de la bandera LGBT, pero a diferencia de otros años, también tuvieron mucha presencia los colores blanco, rosa y azul que representan a la comunidad transgénero.

Los asientes no solo caminaron, sino que se trasladaron en patines, patinetas y scooters; algunos llevaron a sus perros, se caracterizaron de algunos personajes de anime y algunas películas animadas. Todos juntos se tomaron de la mano y gritaron: “Derechos iguales a lesbianas y homosexuales”. El recorrido se dio en el bulevar 5 de mayo, enfrente de Plaza Dorada y siguió así hasta la 7 Oriente para poder llegar al zócalo capitalino.

Estuvieron presente los carros alegóricos, en donde no pudieron faltan las famosas drag queens, símbolo de la libertad de expresión, símbolo de la comunidad y una muestra del arte escénica. Ellas se mostraron con sus vestidos grandes y su maquillaje que tanto las caracteriza, la gente les pidió fotos y ellas accedieron con una gran sonrisa.

Durante todo el trayecto, hubo personas regalando preservativos, quienes se unieron a la marcha y aplaudieron todas las porras, pero al mismo tiempo, se vio un gran número de elementos de la Secretaría de Seguridad Pública (SSP), en su mayoría mujeres, quienes con cascos y su equipo de seguridad rodearon la zona. De igual modo, se pudieron ver trabajadores de la Comisión de Derechos Humanos (CDH).

Fueron muchas las consignas, como: “Dios también hizo sacerdotes gays”, “Derechos iguales para todas las diversidades”, “vivan las infancias LGBT”, “a tu joteria le falta antirracismo”, “nada sobre nosotros, nada sin nosotros”, “era hetero, pero me chingué la rodilla”, “respeta mis derechos”, entre muchas otras.

La marcha también fue aprovechada por comerciantes, quienes vendieron banderas de los colores LGBTTTIQ+, coronas como si fueran de reyes, coronas con flores, flores hechas de estambre, stickers, collares, brillos para la cara, cubrebocas y un sinfín de artículos relacionados con el mes de orgullo.

A diferencia de años pasados, no se vieron personas que amedrentaron a los asistentes, al contrario, hubo señoras que en cartulinas expresaron apoyo a los jóvenes que en su casa son rechazados por ser gay. También salieron de negocios para felicitarlos, otros pidieron fotos a las Drag Queens o pasaban en sus coches y los apoyaban con el claxon. Sólo al llegar al primer cuadro de la ciudad se generó caos vial, pero en ningún momento les faltaron al respeto.

Al llegar a la plancha del zócalo ya los esperaban los organizadores del evento, quienes gestionaron un concierto y varias actividades para seguir conmemorando esta fecha, que es una de las más importantes de la comunidad, pues es muestra de que Puebla cada vez es un estado más libre y con menos sociedad conservadora.

En el zócalo de la ciudad si bien hubo mucha fiesta, también hicieron un espacio para exigir políticas públicas que atiendan a la población LGBTTTIQ+, pero con un enfoque interseccional, pidieron el reconocimiento a las infancias y juventudes trans, así como educación sexual desde una mirada diversa. Para concluir exigieron un alto a los crímenes de odio y a la discriminación.


Local

Sheinbaum fija fecha para rehabilitar 30 plantas de tratamiento en el Atoyac

La subcuenca es una de las más contaminadas de todo el país, de acuerdo con la Comisión Nacional del Agua

Local

Estrena TV Española documental de Cecilia Monzón y exhibe trabas legales del caso

Ahí el fiscal Gilberto Higuera señala que hay pruebas suficientes para dar una condena “ejemplar” a los involucrados

Cultura

Villa Iluminada, Tecate Comuna, Gloria Trevi y más este fin de semana en Puebla

Del 22 al 24 de noviembre habrá diferentes actividades en la ciudad y sus alrededores

Policiaca

Asalta grupo armado Bodega Aurrerá en Xilotzingo a plena luz del día

Los delincuentes rompieron las vitrinas donde se encontraban los teléfonos celulares para poder llevárselos, así como otros objetos de valor

Local

¿Dónde se ubicará la nueva sede de la preparatoria Zapata de la BUAP?

Ubicada en la colonia Jesús García, esta nueva sede revivirá un espacio ya conocido por los poblanos al ser una salida de transporte