En 11 centros de reinserción social de Puebla, la Comisión Nacional de Derechos Humanos (CNDH) detectó hacinamiento, sobrepoblación, insuficiencia de programas para prevenir y atender incidentes violentos, y falta de higiene médica en comedores y áreas deportivas.
En el diagnóstico Nacional de Supervisión Penitenciaria 2018, el organismo detectó que en el Centro Estatal de Reinserción Social de Puebla hay sobrepoblación, ya que su capacidad es de 2 mil 333 personas, pero en el lugar se encuentran presos 3 mil 475 hombres y mujeres.
En condiciones similares se encuentran el Centro de Readaptación Social de San Pedro Cholula, que tiene una capacidad para 171 personas y su población es de 370; el Centro de Reinserción Social Distrital de Acatlán de Osorio, que tiene cabida para 58 personas y alberga a 80; el Centro Penitenciario Distrital de Zacapoaxtla con capacidad para 58 y su población es 70 personas, así como el centro de Zacatlán que tiene cabida para 125 reos y su población es de 142.
El diagnóstico reflejó insuficiencia de personal de seguridad y custodia, presencia de actividades ilícitas, extorsión y sobornos, insuficiencia o inexistencia de actividades deportivas, deficiente separación entre procesados y sentenciados, e insuficiencia de vías para remitir quejas de probables violaciones a los derechos humanos.
Los centros penitenciarios que también fueron evaluados por la CNDH son el Centro de Reinserción Social de Tehuacán, de Ciudad Serdán, Centro Penitenciario Regional de Huauchinango, los distritales de Tecamachalco, Tetela de Ocampo y Teziutlán.
A nivel nacional el Centro de Reinserción Social Distrital de Tecamachalco fue de los peor evaluados, ya que obtuvo una calificación de 4.79. Además, en el centro estatal de Puebla hay 15 mujeres con hijos y dos en el penal de San Pedro Cholula.
La cárcel de Tepexi de Rodríguez fue la única donde la Comisión Nacional de Derechos Humanos detectó una apropiada atención a programas para la prevención y atención de incidentes violentos, prevención de violaciones a derechos humanos y de atención en caso de detención, instalaciones necesarias y condiciones materiales e higiene de los talleres y áreas deportivas.