Fernando Huesca Ramón marcó la vida de sus alumnos como docente. Tras su muerte, quedó un vacío en la comunidad de la Benemérita Universidad Autónoma de Puebla (BUAP).
Para conmemorar su trabajo académico, la comunidad universitaria de la Facultad de Filosofía y Letras (FFyL), donde por años impartió clases Huesca Ramón, develó una placa del aula magna que ahora lleva su nombre.
Decenas de personas se dieron cita en esta unidad académica para compartir anécdotas, palabras de apoyo y agradecimientos al docente, quien falleció el pasado mes de julio.
En la entrada de dicha facultad continúa el memorial que realizaron alumnos, amigos y familiares del docente, en donde los asistentes prendieron algunas veladoras y dejaron arreglos florales.
“No solo hemos perdido a una mente excepcional, hemos perdido a un amigo con el que compartíamos viajes, libros, lecturas, bromas, chistes, abrazos y copas”, fue uno de los mensajes escritos en esta sede.
Dos de sus alumnas de primera generación, Gabriela Aguilar y Mariana Romero, compartieron que este homenaje logró reunir gran cantidad de asistentes gracias al cariño que cosechó el docente no solo en su carrera profesional, sino también personal.
“Nos despedimos con gran cariño, tristes por su partida, pero felices por haber logrado coincidir con alguien tan especial”, expresó una de ellas.