Miguel Cerón Maceda, es un peregrino que junto con cuatro amigos, se dirige a la Ciudad de México para llegar a la Basílica y visitar a la virgen de Guadalupe por un año más.
En la Plaza de la Concordia, del municipio de San Pedro Cholula, toma un descanso y baja de su espalda una imagen de bulto que carga en este recorrido.
Además de la virgen de un metro de altura, Miguel lleva una mochila y con sus compañeros se ayuda para turnarse una bocina y dos docenas de cohetes.
Antes de comer un taco que le obsequió don Manuel Sánchez, quien junto con varios amigos este día dan comida a los peregrinos, platica que es originario de Puebla.
“Soy de Puebla, por Ciudad Universitaria y la virgen que llevo es de la colonia, la tenemos en un altar que adecuamos en la calle y ya llevo cinco años cargando la virgencita, más otros cinco donde todavía no la llevamos y también fui varios años en bicicleta”, indica.
Añade que hoy se despidió de su hogar en esta semana y piensa regresar la próxima semana porque su caminar será de dos o tres días.
Otro feligrés guadalupano, de nombre, Enrique Guevara, de 57 años, cuenta su historia y dice que lleva 36 años visitando de forma ininterrumpida la Basílica de Guadalupe.
“Hoy salimos de La Villita y vamos a llegar el domingo y ahora voy a pedir porque todos estamos bien y porque tengamos más salud y fuerza para salir adelante y que la virgen nos cuide”, manifiesta.
Dice sentir felicidad de que en esta tradición lo acompañan sus hijos y nietos, así como familiares, quienes también tiene fervor por esta imagen.