Decenas de devotos poblanos, vecinos y comerciantes del mercado El Parral celebraron la reapertura del Templo del Inmaculado Corazón de María, recinto que limitó su entrada al público tras haber sufrido daños estructurales en el sismo del 19 de septiembre de 2017.
Como parte de las celebraciones, los devotos, acompañados de flores y veladoras, realizaron una procesión por la manzana de este templo, encabezada por el párroco de esta iglesia, donde además participó una banda de música que entonó canciones al paso de los fieles.
En entrevista con El Sol de Puebla, José Luis Reyeros Pérez, párroco de este templo, explicó que tras el sismo del 2017 la iglesia presentó fisuras en su interior, principalmente en la nave central y los anexos.
“En los salones aún hay unas partes dañadas, solo se reparó el interior del templo, también se rompieron los vitrales y fue lo que frenó las actividades, aunado a la pandemia, tuvimos que cerrar las puertas”, dijo.
Aseguró que con la reapertura de este recinto volverá el número de fieles que visitaban el lugar previo al sismo, pues al igual que en La Villita de la Virgen de Guadalupe, este templo recibía a cientos de devotos, principalmente en junio, durante la fiesta patronal del Inmaculado Corazón de María.
Cabe señalar que, este evento tuvo gran impacto en los locatarios del mercado El Parral, situado frente a la iglesia, quienes durante la reapertura solicitaron la visita del párroco para que bendijera sus locales.
Lo anterior como símbolo de abundancia, pues a decir de algunos comerciantes, este templo no solo aumentó sus ventas gracias al número de devotos que concentraba, sino que representó un acompañamiento espiritual para ellos.
A partir de este lunes, el templo permanecerá con sus puertas abiertas para que los interesados puedan visitarlo, asimismo, las misas dejaron de celebrarse dos veces a la semana y ahora se oficiaran todos los días.