Diana Perla tiene 5 años de edad y, a pesar del confinamiento, desea tener una celebración del 30 de abril, la cual será atípica, pero su madre hará lo posible por hacer de este día un momento especial; así como ella, alrededor de 2 millones de niños poblanos se encuentran en resguardo domiciliario a causa del coronavirus, sin embargo, especialistas en desarrollo infantil coinciden que es importante que los padres no pasen desapercibida esta fecha ya que es una de las más significativas en la etapa infantil y para ello, deberán explotar la creatividad y aprovechar elementos que se tengan en casa.
“Es muy importante festejarlos porque, dentro del calendario escolar, es uno de los días más esperados por los niños. Debemos adaptarnos a las circunstancias que estamos viviendo para no exponernos, pero sin duda, el salir de la rutina y compartir momentos de diversión nos permite convivir más con nuestros hijos y fortalecer la relación”, aseguró Graciela Ortiz Villaroel, directora de Learning Brain, Centro de diagnóstico, evaluación y rehabilitación neuropsicológica.
La especialista en psicología y neuropsicología compartió que, en estas fechas, el deseo de los niños por recibir un obsequio es muy grande, incluso, hay padres que con antelación se preparan para sorprender a los pequeños iniciativa que pidió no cancelarla, sino adecuarla al entorno y condiciones en las que se vive.
MOMENTOS DE DIVERSIÓN: FIESTA DE DISFRACES, COMPETENCIAS DE JUEGOS Y LOTERÍA DE EMOCIONES
Por otro lado, para aquellos que aún no tenían nada programado, dijo, no es necesario salir a comprar regalos, toda vez que pueden aprovechar los elementos que se tengan en el hogar como la tecnología, juegos de mesa, material didáctico y ropa que hayan utilizado en algunos festivales para crear momentos de diversión.
“Podemos hacer una fiesta virtual, una fiesta de disfraces, una albercada, hacer competencias con los juegos de mesa favoritos de los hijos, incluso, podemos hacer una lotería de emociones donde cada uno de los integrantes de la familia comparta cómo se siente y recuerden momentos felices de la familia”, sugirió.
A la par, dijo, si el espacio de la casa lo permite pueden hacer un campamento en la sala o en el jardín, jugar con pistolas o globos de agua, a fin de que los niños tengan momentos de esparcimiento y convivencia familiar.
Ortiz Villaroel enfatizó que este aislamiento transitorio a causa de la pandemia no debería representar dificultades graves para los niños “si nosotros como papás sabemos cómo manejar el estrés y las preocupaciones”, indicó.
CARTELES DE AMOR Y RITUALES DE SOLIDARIDAD
Por su parte, María Elena Castro, directora del Centro de Psicología Infantil, destacó que los dos ingredientes que papá y mamá podrían implementar en este día del niño están basados en combinar el placer con la solidaridad. Conociendo la creatividad de los padres, podrían generar un ritual, que además de hacerles sentir a sus niños lo especial que son, les brinde la posibilidad de construir acciones que nutran su desarrollo personal.
Para ello, compartió, pueden basarse en la experiencia visual. Siendo los niños visuales, podría cada familia de acuerdo a su creatividad, generar un ambiente con fotos, carteles o letreros de expresión de felicidad y amor hacia ellos, o un video sumado con mensajes de todos sus amigos, personas significativas y familiares, felicitándoles y mencionándoles de manera positiva cualidades que fortalezcan su autoestima. “Como ingredientes materiales, quizá pueden prepararles un pastel o unas deliciosas galletas. No les sugerimos regalos materiales costosos, porque nublan la vista de nuestros niños y nos les permiten ver lo que realmente es esencial”, consideró.
PRIVILEGIADOS DE ESTAR EN CASA
Otro punto importante, mencionó es el regalo social. “Papá y mamá pueden preparar el inicio de lo que puede convertirse en un ritual familiar para celebrar su día en donde hagan a los niños conscientes de su comunidad”, indicó.
Para esta actividad pueden sensibilizarlos con una plática breve para explicarles lo privilegiados que son al poder estar en casa “hablarles de los profesionales del sector salud, de las personas que trabajan en las gasolineras, los señores que venden comida, de los agricultores, de las personas que trabajan en el super o en actividades esenciales, personas a las que tenemos que agradecer y comprender”.
A la par podrían planear acciones que le permitan a los niños en su día, de manera divertida y amena expresar su solidaridad a esas personas de manera tangible. Pueden tener previamente materiales de acuerdo a las posibilidades de cada familia, para que sus niños puedan crear una acción concreta para ayudar y expresar gratitud a su comunidad. “Pueden, por ejemplo, crear con ellos, despensas pequeñas con materiales de colores, paletas con letreros para los trabajadores de la salud, cubrebocas, una carta de aliento. Desarrollen su creatividad y diviértanse mientras lo preparen”, indicó.