El gobernador de Puebla, Luis Miguel Barbosa Huerta, reconoció que las decisiones que toma su gobierno para el control de la pandemia del coronavirus en la entidad no son basadas a lo que indica semáforo epidemiológico del gobierno federal, sino a los propios indicadores estatales que consideró más precisos y restrictivos en esta emergencia sanitaria.
“Yo no tengo interés en hacer una propuesta porque mi semáforo de seguimiento es más restrictivo que el semáforo federal. Nosotros cumplimos con el federal, pero nuestras decisiones las tomamos a partir de nuestro seguimiento local y es más restrictivo aún”.
Aseguró que aunque el gobierno federal cambie en estos momentos el semáforo de Puebla de rojo a naranja, para él sigue vigente el rojo, pues afirmó que la incidencia de contagios sigue creciendo y sólo de jueves para viernes 377 nuevas personas contagiadas por Covid-19.
“Yo no voy a discutir los criterios con los cuales se toman las decisiones para definir los colores de cada entidad federativa, no lo voy a hacer, si yo sigo teniendo 377 contagiados estamos en rojo, no estamos en naranja, todavía no estamos en camino a naranja. Si el semáforo federal me dice que ya estamos en camino a naranja le digo que no es cierto, estamos en rojo”.
También lamentó que se busque responsabilizar a los gobernadores de las consecuencias de la pandemia, pues dijo que la ley ya establece las responsabilidades que deben cumplir los mandatarios y no se debe particularizar con el caso del Covid-19 como se hizo en la última reunión de la Conferencia Nacional de Gobernadores (Conago).
“Sobre ese debate que ayer se dijo sobre la responsabilidad en la que incurrían los gobernadores, creo que estuvo mal redactado el documento porque intrínsecamente cualquier servidor público que, a sabiendas de que tiene un encargo, si no cumple ese encargo y derivado de ese incumplimiento hay responsabilidades en la ciudadanía, tiene responsabilidad, no puede ser de diferentes índoles. Es un desatino haberlo puesto, redactado así”, concluyó.