La presidenta de la Comisión de la Familia y los Derechos de la Niñez en el Congreso de Puebla, Mónica Rodríguez Della Vecchia, criticó la resolución de la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN) para que menores de 12 a 17 años puedan abortar en casos de violación sexual sin la autorización de sus padres.
La legisladora del Partido Acción Nacional (PAN) consideró en entrevista que las niñas y adolescentes no deberían tener acceso a la Interrupción Legal del Embarazo (ILE) sin el respaldo de sus progenitores, ya que desde su óptica, es un proceso peligroso y en el que podrían tener complicaciones médicas.
Además, Mónica Rodriguez opinó que el procedimiento puede tener grandes implicaciones físicas y psicológicas para las menores que afectarían su pleno desarrollo.
“Lo que estoy cuestionando es la edad en la que una niña pueda ir a practicarse un aborto sin ser acompañada de ningún familiar, cuando es un proceso en el que puede correr riesgo su vida y que tiene otras implicaciones físicas y psicológicas”, comentó.
La legisladora aseveró que la modificación a la Norma Oficial Mexicana (NOM-046) que fue aprobada el martes por la SCJN, no toma en cuenta que las mujeres menores de 18 años corren riesgo al someterse a un aborto.
Desde la óptica de la diputada local, lo ideal sería que las madres y padres cuiden de forma adecuada a sus hijas para evitar que sean víctimas de violación, así como la implementación de políticas públicas para prevenir embarazos infantiles.
Apuntó que los tres niveles de gobierno deberían iniciar campañas para que las mujeres reciban una educación sexual adecuada desde temprana edad.
De acuerdo con lo aprobado por el Pleno de la SCJN, los hospitales públicos del país están obligados a practicar abortos a las menores de 12 a 17 años que hayan sufrido violación sexual, incluso sin la autorización de sus padres o tutores.