En las últimas 24 horas, el volcán Popocatépetl ha presentado una actividad notable, con un total de 51 exhalaciones detectadas. Estas exhalaciones estuvieron acompañadas de vapor de agua, gases volcánicos y ligeras cantidades de ceniza, según lo informado por el Centro Nacional de Prevención de Desastres (CENAPRED).
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Durante la mañana de hoy, 26 de julio, se reportó una visibilidad parcial hacia el cráter del volcán debido a las condiciones meteorológicas en la zona. A pesar de esto, se pudo observar una emisión constante de vapor de agua y gases volcánicos con dirección al oeste, lo cual ha mantenido en alerta a las autoridades y a la población cercana al coloso.
El Semáforo de Alerta Volcánica del Popocatépetl se encuentra actualmente en color Amarillo Fase 2, lo que indica un nivel de actividad intermedia. Dentro de los escenarios previstos para esta fase se encuentran algunas explosiones de tamaño menor a moderado, la presencia de tremor de amplitud variable, lluvias de ceniza leves a moderadas en poblaciones cercanas.
En algunas ciudades más distantes se podrá ver la expulsión de fragmentos incandescentes dentro del radio de exclusión de 12 kilómetros, y la posible ocurrencia de lahares debido a la acumulación de ceniza en las laderas y su interacción con las lluvias esperadas en la región.
Autoridades han recomendado a la población mantenerse informada a través de los canales oficiales y seguir las indicaciones de protección civil en caso de alguna eventualidad. Es importante recordar que el volcán Popocatépetl es uno de los más monitoreados en el país debido a su histórica actividad eruptiva y su proximidad a zonas pobladas, por lo que se mantiene una constante vigilancia para garantizar la seguridad de la población.
El trabajo del Cenapred con el volcán Popocatépetl
El Centro Nacional de Prevención de Desastres (CENAPRED) es un organismo mexicano encargado de coordinar y promover acciones para la prevención de desastres naturales y antropogénicos, así como de gestionar la alerta temprana y la atención de emergencias derivadas de estos eventos.
El principal objetivo del CENAPRED es contribuir a la reducción del riesgo de desastres en México a través de la generación de conocimiento, la identificación de zonas vulnerables, la implementación de medidas de prevención y mitigación, y la coordinación de acciones entre los distintos niveles de gobierno, la sociedad civil y la academia.
El Centro Nacional de Prevención de Desastres se encarga de monitorear y emitir alertas sobre fenómenos como erupciones volcánicas, sismos, huracanes, inundaciones, entre otros, con el fin de proteger la vida y el patrimonio de la población mexicana.
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