Entre domingo y lunes, el volcán Popocatépetl se mantuvo en calma pues según el Centro Nacional de Prevención de Desastres (Cenapred) solamente registró 28 exhalaciones que estuvieron acompañadas de vapor de agua y gases volcánicos.
Durante la noche no se observó incandescencia sobre el cráter, según explica el organismo en su reporte diario.
El sábado 30 de marzo, con apoyo de la Policía Federal (PF), expertos del Centro Nacional de Prevención de Desastres y del Instituto de Geofísica de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM), realizaron un vuelo de reconocimiento de las condiciones del cráter del Popocatépetl.
Durante este ejercicio se verificó que, como resultado de las más recientes explosiones, las dimensiones del cráter interno aumentó, alcanzando 350 metros de diámetro y 250-300 metros de profundidad. además No pudo corroborarse la presencia de un domo de lava.
El Semáforo de Alerta Volcánica del Popocatépetl se encuentra en amarillo fase 3, cuyos escenarios previstos son: crecimiento rápido de domos de grandes dimensiones y su destrucción en explosiones fuertes; persistencia de fumarolas, gas y caídas leves de cenizas en áreas cercanas; explosiones de intensidad creciente con lanzamiento de fragmentos incandescentes; y posibles flujos piroclásticos de mediano alcance.